A largo plazo los coches híbridos tienen un papel dudoso en la reducción de emisiones, especialmente aquellos que no son enchufables -digamos autorrecargables-. Siguen consumiendo energía de origen fósil, pero sus emisiones son bajas y son más fáciles de adquirir por más automovilistas. En el Reino Unido se plantean prohibir anticipadamente los híbridos en 2030, y si dejan alguno con posibilidades de matricularse, será enchufable.
Toyota, cuarto fabricante del Reino Unido, se opone a esa medida. En los planes a largo plazo del fabricante, incluso en 2030 los híbridos seguirán teniendo un papel muy relevante en su gama. Perder el Reino Unido como mercado hace menos imprescindible su presencia en Inglaterra y Gales, donde el año pasado se fabricaron unos 125.000 Corolla.
El Telegraph informa que InfluenceMap ha obtenido, mediante una petición de transparencia, la posición de Toyota respecto a la próxima legislación del Reino Unido: «Si el Gobierno adopta una política SZEC, requisito que causa un final anticipado de la venta de nuevos vehículos híbridos e híbridos enchufables en 2030, habrá impactos en un número de áreas». Se refieren a fabricación, distribución y otras actividades de negocio, así como futuras inversiones.
El Gobierno británico está sondeando las posiciones de los fabricantes y grupos ecologistas antes de elaborar la legislación. Actualmente Toyota emplea unas 3.000 personas en el país. Por un lado está la fábrica de ensamblaje TMUK (nombre oficial de la fábrica) de Burnaston (Inglaterra), y también hay una planta de motores en Deeside (Gales). Las operaciones de producción de coches en el Reino Unido se remontan a diciembre de 1992, cuando salió el primer Carina E (con «E» de europeo) de la cadena, los motores se empezaron a producir un poco antes.
Ciertamente Toyota tendría margen para terminar sus operaciones en el Reino Unido, habida cuenta de su capacidad de producción de coches híbridos en otras localizaciones de Europa continental, Turquía o Japón. Ya estuvo en tela de juicio la permanencia de su huella industrial a cuenta del «Brexit», aunque Toyota apostó anticipadamente a que habría un acuerdo comercial libre de aranceles con la Unión Europea (lo cual finalmente sucedió) para asignar el Corolla a Burnaston.
La producción de Toyota destinada al mismo Reino Unido es significativa, en 2021 fueron 19.341 unidades del Corolla Hybrid, el resto fueron para exportación. Desconocemos los planes de fabricación de coches eléctricos de Toyota para Europa. De momento el bZ4X se fabrica exclusivamente en Japón. A finales de 2021 Toyota desveló de golpe y porrazo 15 prototipos de coches eléctricos; tenerlos los va a tener, pero no serán la mayoría de sus ventas en 2030 de acuerdo a sus previsiones.
