El gobierno chino ha visto que el apostar por las energías renovables es el único camino para un futuro energético sostenible. Como ejemplo los dos proyectos que están en marcha en el gigante asiático, entre otros muchos, que se han convertido en las instalaciones fotovoltaicas en construcción más grandes del mundo acumulando solo entre ellas dos más de 6 GW, lo que supone el 40% de la potencia fotovoltaica instalada en España.
La primera y más avanzada en sus trabajos es una instalación solar de 3,3 GW, con 520 MWh de almacenamiento, que la empresa estatal China Huadian está construyendo actualmente en Changdu, provincia de Sichuan y que es la más grande del mundo. Un proyecto con un presupuesto de 2.500 millones de dólares y que estará en funcionamiento a pleno rendimiento en 2025.
La segunda instalación acaba de iniciar su construcción y se localizará en la provincia china de Hunan. Una granja solar de 3 GW que se situará en la localidad de Zhongwei, y que se caracteriza por ser una región poco habitada y desértica.
Esta contará con un presupuesto de 2.200 millones de dólares y se irá conectando a la red en fases de 1 GW cada una. La planta se conectará a la línea eléctrica de ultra alta tensión Ningxia-Hunan de 800 kV UHV.
Sus promotores han indicado que se espera que este parque solar produzca 5.780 millones de kWh por año una vez que esté completamente terminada y será una de las cinco grandes instalaciones en las que trabaja el gobierno chino.
Proyectos que demuestran la fuerte apuesta de China por las renovables en las que han apostado muy fuerte y como ejemplo los 140 GW entre eólica y solar que el gigante asiático pondrá en marcha este 2022. Más que el resto del mundo combinado en 2020.
Pasos que las autoridades de Pekín esperan les permita lograr que para 2030 que la eólica y la solar cuenten con una potencia instalada de 1.200 GW. Cifra que podemos comparar con los 678 GW con los que contaba a finales de 2021 China.
