El pasado año NIO anunció sus planes de expansión para Europa, donde además de una implantación comercial también contemplaba la puesta en marcha de una fábrica. Una instalación dedicada en un primer momento al servicio técnico y postventa de los vehículos, así como la producción de estaciones de cambio de batería. Una instalación que esta semana ha dado comienzo oficialmente a sus actividades.
La instalación ocupa una superficie de 10.000 metros cuadrados y está situada en las afueras de Budapest, Hungría. Un espacio que supone la primera fuera de China del fabricante asiático que ha inaugurado sus actividades con la puesta en marcha de las primeras estaciones de cambio de batería.
Estas están ya de camino hacía Alemania, donde se instalarán las primeras después de las puestas en marcha de forma experimental en Noruega. Un proyecto que busca posicionar a la marca y su ecosistema como una alternativa diferente a los grupos occidentales.
La planta húngara servirá tanto como centro de producción, servicio, como también de I+D para los productos de energía de NIO en Europa, y será un respaldo al objetivo de NIO de construir un total de 1.000 estaciones de intercambio de baterías fuera de China para 2025.
Según el cofundador y presidente de NIO, Qin Lihong, «El entorno inclusivo y positivo para la inversión y la cooperación en Hungría ha garantizado el buen funcionamiento de nuestra fábrica y la producción de la estación de intercambio«.
NIO aumentará aún más su inversión en Hungría y establecerá un centro de operaciones para implementar las estrategias de la compañía en los mercados europeos como es la expansión de su gama de coches eléctricos con los que quiere conquistar el mercado.
Una estrategia desvelada el pasado 18 de diciembre, donde desde la marca china se ha indicado que NIO se expandirá este año por Alemania, Países Bajos, Suecia y Dinamarca, llegando a más de 25 países para 2025.
Fuente | NIO
