Tres años y siete meses después de su presentación, por fin ha comenzado la distribución del Tesla Model X. En un acto que ha tenido como escenario una nueva instalación del fabricante norteamericano, se ha procedido a entregar las primeros cinco unidades a los primeros cinco afortunados propietarios.
Como no podía ser de otra manera, Elon Musk ha sido el encargado de conducir el evento. Aclamado como una estrella de rock, Musk ha comenzado su comparecencia con un discurso donde hace mención a la necesidad de moverse hacia formas de movlidad sostenible.
Seguridad
El primer aspecto que ha tratado es la seguridad. Según Musk, el Model X eleva hasta cotas hasta ahora inimaginables el nivel de seguridad de los ocupantes, consiguiendo la máxima puntuación de la agencia de seguridad en la carretera de los Estados Unidos (NHTSA).
Se trata del primer SUV, o todocamino, que logra cinco estrellas en cada uno de los apartados. En el general el Model X ha logrado un 6.5% de puntuación, siendo mejor cuanto más baja es la misma.
Una de las claves es la ausencia de un motor de combustión, que en caso de impacto frontal puede afectar por su intrusión en el habitáculo a la seguridad de los ocupantes. En el Model X estos motores están montados cerca de las ruedas, lo que unido a su pequeño tamaño, hace que la distancia de deformación sea mucho mayor, incrementándose la seguridad para los ocupantes.
En cuanto al impacto lateral, la cifra de penetración durante el impacto en el Model X ha sido la mitad que su competencia directa, como el Adi Q5 híbrido o el Volvo XC60. Esto puede verse de una forma más gráfica en la imagen superior, donde podemos ver el resultado de esta prueba en el hasta ahora mejor resultado, a la derecha, y el logrado por el Model X. La diferencia es realmente importante.
En la prueba del volcado, El Model X también logra una puntuación muy por encima de la competencia. Según Musk, esto se debe principalmente a la posición en los bajos de la batería, que junto con un chasis robusto, reduce el efecto en caso de que el coche sufra un accidente y de vueltas de campana.
Seguridad activa
Pero como dice Musk, la mejor seguridad es aquella que evita el accidente. Para ello el Model X llega cargado de soluciones que nos ayudan a evitar los accidentes. Un sistema de cámaras y sensores capaces de leer la carretera y todo lo que sucede en ella.
Este es capaz de frenar de forma automática en caso de despiste, e incluso evita que el coche se salga de la carretera. Algo que está funcionando todo el tiempo, y forma parte del equipamiento de serie en todos los acabados.
De momento pese a los rumores, parece que la actualización 7.0, que activa el sistema de conducción autónomo, tendrá que esperar un tiempo más. Se aguardaba que fuese liberada de forma general durante este acto, pero no ha sido así.
Filtro de partículas
Una de las sorpresas del evento ha sido la presentación de una funcionalidad de la que hasta ahora no se había comentado nada. El filtro de partículas. No es que el Model X lleve un contaminante motor diésel, si no que Tesla ha querido que además de no contaminar con su coche, el conductor y ocupantes puedan disfrutar en el interior de un aire más limpio gracias a tres potentes filtros anti partículas. Algo que agradecerán aquellos que viven en zonas especialmente contaminadas.
Se trata de un filtro que multiplica por 10 el tamaño de los filtros convencionales. Un filtro que tiene mucho sentido en algunas de las ciudades que Tesla ha mostrado durante la presentación, y donde se puede ver el efecto tan negativo para la salud de aquellos que viven en estos lugares, donde gracias a su capacidad de retener hasta 800 veces lo que un filtro convencional puede conseguir, el conductor del un Tesla puede respirar un aire mucho más limpio de partículas.
Por supuesto, no hay noticias del coste de sustituir estos tres filtros, pero en lugares como Pekín, donde la esperanza de vida se reduce en 22 meses por culpa de la contaminación, seguro que esto no es un problema. Un sistema de filtrado que lleva la calidad del aire a la de una sala de operaciones de un hospital.
La cosa va más allá. Si hasta ahora en los coches hemos visto el botón para cerrar la entrada de aire del exterior, por ejemplo cuando pasamos por una zona con malos olores, Tesla ha llevado esta característica a la máxima expresión añadiendo un botón que sella el interior, y le permite sobrevivir a un ataque biológico. Al principio parecía una broma, pero la sorpresa ha sido cuando ha dicho que este botón existe, y lo ha mostrado.
Puertas y ventanas
Debe ser la primera vez que las puertas son unas de las principales protagonistas en la presentación de un coche. Había mucha expectación por conocer como funciona el sistema de apertura de las puertas traseras, tipo alas de gaviota, pero la primera sopresa ha llegado desde las delanteras.
Tesla ha llevado la apertura automática a un nuevo nivel. El conductor no tendrá que tocar la puerta para acceder al coche. Ni siquiera tendrá que pulsar un botón, o un tirador…nada. El propio coche detecta nuestra presencia, y abre y cierra de forma automática las puertas delanteras.
También interesante el parabrisas delantero. Un cristal que ofrece una panorámica infinita similar a la que disfrutan los pilotos de helicóptero.
Puertas traseras
Pero sin duda las protagonistas de este apartado son las puertas traseras. Para muchos ha sido la principal causas del tremendo retraso en el lanzamiento del Model X. Una de las principales razones de esta complicada solución era el acceso a las plazas traseras. Con un sistema sin pilar, es más sencillo acceder a la tercera fila de asientos.
Pero para lograrlo hay que pulsar un botón que mueve la segunda fila. Esto significa que si la segunda está ocupada, no será posible acceder a la última, o al menos será bastante complicado a no ser que el ocupante sea un niño, y esté perfectamente anclado al asiento.
Pero como podemos ver, incluso Elon Musk, con sus 1.85 metros de altura, es capaz de entrar y salir sin grandes problemas, siempre y cuando claro, los asientos delanteros estén recogidos.
Una de las preguntas era como se abrirían estas puertas en caso de no contar con espacio suficiente. Para ello Elon Musk ha colocado un par de coches, de la competencia, a los lados del Model X, separados por unos pocos centímetros. Una situación que nos podemos encontrar cualquier día en un centro comercial.
Como podemos ver, no hay problema ya que antes de comenzar su apertura lateral, primero desplaza las puertas de forma superior, para abrirse donde no sea un peligro para el resto de coches. Un sistema que mejora incluso las puertas correderas tradicionales en los grandes monovolúmenes, ya que no hay puerta que se coma esos pocos centímetros que nos ha dejado el otro coche.
¿Y que pasa si en vez de lateral, el poco espacio es hacia la parte superior? Como por ejemplo en un garaje. Para evitar rayar el coche, las puertas cuentan con un sensor capaz de detener su ascenso cuando detectan que van a impactar contra el techo.
Capacidad de carga
Otro de los puntos diferenciadores respecto al Model S. El Model X puede llevar en su maletero una enorme cantidad de carga, también en su maletero delantero, y a esto añade la capacidad para tirar de un remolque de hasta 2.200 kilos. Algo casi inaudito en un coche eléctrico.
Para demostrarlo, Tesla ha llenado una unidad con una familia entera, la del co-fundador de Tesla JB Straubel, con sus dos niños, sus maletas y bolsas. Una carga que ocupaba buena parte del escenario una vez retirados del coche. Un verdadero monovolumen familiar.
Destaca el «frunk» o maletero frontal, de donde además de varias maletas, los ocupantes sacan una silla para dos bebes.
Importante para aquellos que suelen salir a dar una vuelta en bici, y necesiten un soporte para la misma en el coche. Tesla ha desarrollado un sistema que un niño puede colocar y retirar en apenas 10 segundos. Un sistema realmente sencillo y funcional, que nos permite llevar hasta 4 bicicletas, o 6 equipos de ski. Todo sin perder el acceso normal al maletero.
Prestaciones
Por supuesto las prestaciones son muy importantes para un modelo de 700CV. Las cifras ya las conocemos, pero no dejan de ser sorprendentes.
La versión que de momento será la básica, la 90D, cuenta con una autonomía de 413 kilómetros con cada carga, tracción a las cuatro ruedas, y puede acelerar hasta las 60 millas por hora (96.6 km/h) en 4.8 segundos.
Por su parte la versión más potente, la P90D, logra una autonomía algo menor, 403 kilómetros, pero lleva la aceleración hasta los 3.8 segundos. Una cifra que incluso puede mejorarse añadiendo el modo de aceleración Ridículo, que baja la cifra hasta los 3.1 segundos. Dignos de un superdeportivo.
Después de esta pequeña presentación de unos datos que ya conocíamos, Elon Musk ha procedido a la entrega de llaves de los primeros propietarios que no han dejado pasar la ocasión de dejarnos algunas imágenes realmente divertidas.
Podéis ver todo el evento en el siguiente link | Tesla
