De un tiempo a esta parte, los patinetes eléctricos han emprezado a proliferar por las calles de las grandes ciudades. Con el avance de la movilidad eléctrica y la mejora de las baterías, estos pequeños vehículos de dos ruedas se están empezando a imponer como una alternativa a los cilcomotores más ligera y barata. Esto, sumado a que todavía no existe una regulación firme para este tipo de medios de transporte, hace que incluso empresas como Lime hayan empezado a ofrecer un servicio de alquiler por minutos con estos patinetes.
Tal es el desarrollo de este tipo de vehículos que traemos el que a día de hoy es el patinete más evolucionado del mercado: el Dualtron Ultra. Este patinete consta de dos motores, uno en cada rueda, de 2.500 W cada uno, lo que hace que combinados den una potencia máxima de 5.400 W. Gracias a esta potencia, la velocidad máxima es de nada menos que 85 km/h, una cifra impresionante dado que hablamos de un vehículo de apenas 37 kg de peso.
La batería, de 2.072 Wh, permite que el Dualtron Ultra tenga una autonomía (según datos del fabricante) de 100 kilómetros en el modo ECO, es decir, utilizando únicamente un motor, y de entre 50 y 60 kilómetros en modo de máxima potencia. Para cargar completamente su batería monta dos cargadores, uno de 2 A y otro de carga rápida, por lo que el tiempo de recarga puede ser de 17 horas con el cargador lento o de 5 horas con el cargador rápido.
Para controlar toda esta potencia, el Dualtron monta dos frenos de disco perforados en ambas ruedas. Además, para la ayuda en frenada los motores entran en modo regenerativo, lo que contribuye a evitar un desgaste excesivo de las pastillas de freno.
La suspensión de este patinete absorbe sorprendentemente bien los baches, piedras o diferentes irregularidades gracias a el brazo articulado que monta en el eje delantero y el sistema basculante del eje trasero, ambos macizos de acero. Cuenta también con luces led delanteras y traseras que se activan con un botón en la base del patinete.
El precio de venta al público se sitúa entre los 3.000 y los 3.600€, que si bien puede parecer un precio excesivo de compra comparado con un ciclomotor o un coche de segunda mano, la ventaja de este patinete frente a otras alternativas es la ausencia de gastos como seguro e impuestos y el casi nulo mantenimiento, salvo neumáticos y pastillas y discos de freno.
Una prueba por parte de Vicesat
