En el mes de agosto, Elon Musk anunció en Twitter su plan para sacar a Tesla del mercado bursátil, lo que tuvo como consecuencia un baile de subidas y bajas en el valor de las acciones del fabricante americano. Finalmente este proyecto no se llevó a cabo debido a la negativa de la junta directiva de la compañía, y la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) ha impuesto una multa a Tesla y a Elon Musk por manipular el valor de las acciones, obligando además a Musk a abandonar la presidencia de su compañía durante tres años.
En su momento, se supo que Arabia Saudí estaba interesada en invertir unos 40.000 millones de dólares en Tesla. Sin embargo, ahora se ha revelado que fabricantes de automóviles como Volkswagen también estaban interesados en entrar en el accionariado de Tesla, en el caso del gigante alemán mediante una inversión de unos 30.000 millones de dólares. Aparentemente, en ese momento Musk no confiaba en los fabricantes tradicionales que querían invertir en su compañía.
Esta historia se remonta a la primavera de 2018, cuando algunos ejecutivos de Volkswagen insinuaron que una vez que Tesla comenzara a enfrentarse a problemas financieros graves, varias compañías de automóviles estarían interesadas en tomar su control, ya fuera haciéndose con parte de su accionariado o mediante la compra directa de la empresa entera. Si bien los ejecutivos no confirmaron que Volkswagen estuviera interesada, sí que dijeron que se estaban preparando para la caída de Tesla, pues próximamente llegaría al mercado un aluvión de competidores eléctricos.
A Volkswagen le interesaría la compra de Tesla por varias razones. La primera sería poder aprovechar su cuota de mercado, pues tienen una posición dominante en las ventas de coches eléctricos, así como una buena imagen. Por otro lado, podrían explotar la tecnología de la empresa, utilizar instalaciones como la Gigafábrica 1 de Nevada para producir baterías de forma masiva, e incluso realizar sinergias con los futuros coches eléctricos del grupo.
A pesar de que Tesla finalmente se ha quedado en el mercado bursátil, lo más probable es que en el futuro tenga que llevar a cabo nuevas rondas de financiación para expandirse. En dicho contexto, es altamente probable que fabricantes como Volkswagen decidan invertir en la compañía americana, que de un tiempo a esta parte se ha convertido en un rival a tener en cuenta no sólo en el mercado del coche eléctrico, sino también en el sector premium.
Fuente | Autoweek
