Corría el año 2000 cuando BMW presentó la C1, un peculiar scooter que apenas duró dos años en el mercado y que se caracterizaba por tener parabrisas, techo, asiento con respaldo y reposacabezas y hasta cinturón de seguridad. La C1 fue un intento de BMW de atraer a los propietarios de coches pequeños hacia su gama de motos, pues gracias al techo y al cinturón de seguridad, el scooter podía ser utilizado sin casco.
Sin embargo, la moto fue rápidamente discontinuada, pues a pesar de lo rupturista de su propuesta, no consiguió conquistar a un público que no quedó convencido por la mezcla de características de coche y moto que proponía. A pesar de todo, no parece que BMW se haya olvidado de la C1, pues recientemente se ha filtrado una patente registrada en noviembre de 2017 que contempla la creación de una carrocería modular similar a la de la C1 para la C Evolution, la moto eléctrica de BMW.
En los diseños filtrados se puede ver como la carrocería se anclaría a un chasis de C Evolution, y que contaría entre otras cosas con techo, un asiento completo y un área de almacenamiento. Dada su naturaleza eléctrica, esta moto también nos recuerda al primer prototipo de un scooter a baterías desarrollado por BMW, la C1-E presentada en 2009. Dicho prototipo fue presentado siete años después de la desaparición de la C1, y consistió en combinar el original diseño del viejo scooter cubierto con una motorización 100% eléctrica.
Lo más interesante del diseño modular presentado por BMW es que se podría implementar fácilmente en motos ya fabricadas, por lo que si un usuario decidiera a posteriori que le gustaría que su scooter tuviera techo, este podría instalarse fácilmente separando el cuerpo original del chasis. Además, todo parece indicar que esta solución también podría aplicarse en motos con motorizaciones térmicas, no sólo eléctricas.
Por el momento, no está claro que BMW vaya a lanzar una versión con techo de la C Evolution o de otras motos de su gama, pues el fracaso de la C1 sigue siendo difícil de olvidar. Además, el pobre desempeño comercial conseguido en Europa por el Renault Twizy, un cuadriciclo eléctrico que mezcla algunas características de scooter con otras de automóvil, nos lleva a pensar que la opinión del público en relación a estos «experimentos» sigue siendo muy similar a la de principios del 2000, cuando la C1 fue revelada al mundo.
Fuente | motorcycle.com
