El cargar nuestro vehículo eléctrico, ya sea un coche, una moto o una bici, cuando nos movemos por zonas pocos accesibles es sin duda un problema. Para ayudarnos en esta tarea la empresa americana Bluetti ha lanzado al mercado un panel solar fotovoltaico que podremos plegar y llevar a cualquier lugar con nosotros.
Se trata de un sistema que además de plegarse, y quedar en el tamaño de una pequeña maleta, contará con una serie de celdas que logran un elevado nivel de eficiencia que sus diseñadores indican llega al 23.4%.
Con cada placa podremos obtener una potencia pico de 350W con un voltaje de 46,5 V y una corriente de 10,8 A. Puede funcionar a temperaturas que oscilan entre -10 C y más de 50 grados, y está fabricado con una estructura con aislamiento IP65. Está encapsulado con etileno tetrafluoroetileno (ETFE).
Sin duda una de sus principales características es su reducido y compacto tamaño. Cuando está desplegado, mide 2.400 mm x 905 mm y, cuando está plegado, su tamaño es de 905 mm x 613 mm x 65 mm. Todo con un peso de 13,9 kg.
La idea del sistema es principalmente ofrecer un apoyo eléctrico a actividades en el campo o montaña, en unos paneles que se pueden poner en serie para lograr mayores potencias y de esa forma conseguir inyectar unos kilómetros de autonomía a un coche eléctrico en cada jornada.
Un accesorio que se puede combinar con otros de la compañía como sus fuentes de energía portátiles y las baterías externas, con potencia de salida nominal de 3 kW y una capacidad de hasta 5.1 kWh, que pueden almacenar energía suficiente para alimentar la iluminación de una tienda de campaña o pequeña cabaña, cargar la batería de una moto eléctrica media, o proporcionar varias cargas a una bici eléctrica.
En cuanto a su precio, en Europa este nuevo modelo está disponible por 899 euros por unidad, mientras que el modelo de 200W cuesta 499 euros.
También ofrecen packs ya preparados con todo incluido, donde por ejemplo vemos uno que cuenta con dos placas, 700W de salida pico, batería de 2 kWh formada por celdas LFP y con salida de 2 kW, todo por 3.700 euros. Un precio elevado respecto a una instalación residencial, pero que podremos llevar con nosotros fácilmente.
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