Alpine, la marca deportiva del Grupo Renault, ha revelado hoy los primeros detalles de su nuevo plan estratégico, que contempla el lanzamiento de siete modelos completamente eléctricos y su expansión a mercados clave como Estados Unidos. Su objetivo es lograr un margen operativo superior al 10% para finales de la década.
De cara al año 2026, Alpine discontinuará el actual A110 térmico, momento en el que su gama pasará a ser exclusivamente eléctrica. Además, la firma normanda se ha puesto como meta alcanzar una producción neutra en carbono para 2030.
«Alpine es la marca para los entusiastas del automovilismo y la tecnología punta. La excelencia es su enfoque. Hace solo dos años, Alpine estaba en un callejón sin salida, sin perspectivas claras. Desde entonces, se ha convertido en un fabricante de automóviles de pleno derecho, reuniendo activos sobresalientes: un centro de ingeniería de primera clase […] y una red de distribución en expansión», explica Luca de Meo, CEO del Grupo Renault .
El primer coche eléctrico de Alpine será el A290, un hot hatch del segmento B derivado del Renault R5. Previsto para 2024, este modelo se asentará sobre la plataforma CMF-B EV. En 2025 llegará un crossover GT del segmento C, mientras que a finales 2026 se lanzará la tercera generación del A110.
Alpine se ha asociado con RedBird y AutoNation para su expansión estadounidense
La empresa ha aprovechado la ocasión para confirmar que desarrollará una plataforma para deportivos eléctricos denominada APP (Alpine Performance Platform), la cual no sólo sustentará al renovado A110, sino también a su versión roadster y al nuevo A310, un coupé deportivo de cuatro plazas que retomará el nombre de su modelo insignia en los años 70. Tras ellos se sumarán sendos crossovers encuadrados en los segmentos D y E.
En paralelo, la compañía está trabajando en un motor de combustión interna alimentado por hidrógeno, una tecnología que, de salir adelante, se ofrecerá como alternativa a los sistemas de propulsión 100% eléctricos en algunos de sus vehículos.
«Esta amplia gama de automóviles deportivos consolidará nuestra participación en mercados clave como Europa y Japón. Impulsará nuestro crecimiento internacional, particularmente en Estados Unidos y Asia, donde nuestros nuevos modelos se pondrán a la venta a partir de 2027. Nuestro objetivo es expandirnos de una marca de nicho a una marca global con todas las de la ley», señala Laurent Rossi, CEO de Alpine.
La plataforma APP estará definida por software y se beneficiará de los desarrollos tecnológicos de Ampere, la división eléctrica del Grupo Renault. Por otro lado, Alpine se aliará con Google para ofrecer servicios de conectividad de última generación. Las baterías de sus coches eléctricos de alto rendimiento serán suministradas por Verkor, que las fabricará en Dunkirk (Francia).
