Después de un anómalo 2022, donde las cadenas de suministros y la guerra de Ucrania causaron un shock en el mercado, este año la situación se está recuperando. Y uno de los sectores que más lo está notando es el de los paneles solares. Especialmente en su principal foco de producción, China, donde los costes de producción han entrado en una espiral de fuertes caídas que supondrán un descenso de los precios para los paneles en todo el mundo.
Así lo indica el último informe de la consultora energética OPIS, que ha publicado un estudio donde pone de relieve la fuerte y rápida caída de los costes de los módulos solares en China, que se ha acelerado en los últimos meses.
Un ejemplo de la dinámica lo encontramos en el descenso del 11.73% de los costes en apenas una semana. Una cifra récord nunca vista hasta el momento motivado por varios factores, entre los que están el elevado stock de paneles en Europa, así como el descenso del coste de los precios del polisilicio en China, muy cerca de sus mínimos.
Durante la pasada feria Intersolar, celebrada en Alemania, se han podido ver precios en el arco de entre 0.170 y 0.175 dólares el vatio, con algunos fabricantes ofreciendo sus productos incluso por debajo, con ofertas de 0.150 dólares el vatio.
Esto puede ser un aviso a los distribuidores europeos, y es que según los datos de la UE, el pasado año se instalaron en nuestro mercado un total de 46,1 GW de fotovoltaica. Pero un informe de SolarPower Europe indica que los envíos desde China llegaron a los 85 GW. Algo que nos indica que hay al menos 39 GW de paneles almacenados en nuestro continente que los vendedores tendrán que sacarse de encima lo antes posible a la vista del derrumbe de precios en China.
A la vista de esta situación, es de esperar que a corto plazo los precios de los módulos sigan cayendo durante este trimestre, y se estabilicen en el siguiente. Pero esto seguirá teniendo un impacto en un mercado que tendrá que ajustar sus precios para no correr el riesgo de acumular stock de paneles con precios más elevados que los del mercado.
En la actualidad es posible encontrar kits en España con precios de unos 2.000 euros para sistemas de acceso de 3 kW, mientras que otras opciones más capaces, con 8 kW, puede rondar el kit solar más inversor por unos 4.600 euros. Precios a los que hay que sumar instalación, pero que muestran que cada vez es más barato aprovechar el sol para reducir nuestra factura eléctrica.
