Hyundai está ultimando el desarrollo de su nuevo coche eléctrico de acceso, el Casper. Este pequeño crossover del segmento A ya se comercializa en Corea del Sur con dos motorizaciones de gasolina (1.0 MPi de 76 CV y 1.0 T-GDi de 100 CV); sin embargo, a Europa sólo llegará el modelo cero emisiones.
Su producción en serie comenzará a principios de 2024, mientras que las primeras entregas en su mercado natal tendrán lugar en primavera. Por lo tanto, lo más seguro es que su desembarco en el viejo continente no tenga lugar hasta el segundo semestre. Dentro de la gama Hyundai, estará llamado a reemplazar al actual i10.
El Hyundai Casper eléctrico ya ha sido avistado durante sus test finales por algunos medios coreanos. A pesar del denso camuflaje utilizado en las unidades de pruebas, se puede apreciar que elementos como la calandra (que pasará a estar cegada) o las llantas cambiarán respecto a su hermano con motor de combustión interna.
Asentado sobre la plataforma K1, se tratará de un automóvil bastante pequeño (3,60 metros de largo) orientado a un uso urbano. Si bien estará homologado para cuatro plazas, tendrá un habitáculo muy modulable, ya que los respaldos de los asientos se podrán plegar para lograr una superficie plana, una solución ideal para ir de acampada. La segunda fila se desplazará longitudinalmente, lo que permitirá incrementar el volumen del maletero hasta los 301 litros.
El Hyundai Casper eléctrico se presentará el año que viene
En su momento, Hyundai confirmó un precio objetivo de 20.000 euros, pero esta ambiciosa cifra posiblemente sea difícil de alcanzar debido al aumento de los costes materiales y energéticos. En cualquier caso, podemos dar por sentado que costará menos de 25.000 euros, convirtiéndose en uno de los principales rivales del popular Dacia Spring.
«Todo el mundo en la industria sabe que el [precio] objetivo de este tipo de vehículos es de 20.000 euros», señalaba el año pasado Andreas-Christoph Hofmann, jefe de marketing de Hyundai en Europa. BorgWarner será el encargado de suministrar el tren propulsor del vehículo. De acuerdo con las informaciones previas, el inversor y la electrónica de potencia estarán integrados en una misma unidad con el motor eléctrico de imanes permanentes.
Dado que se tratará de un automóvil enfocado a un uso eminentemente urbano, lo más probable es que su autonomía homologada se sitúe en 200-300 km WLTP. Sus especificaciones técnicas no debería diferir demasiado de las del KIA Ray, que ronda los 87 CV (64 kW) de potencia y equipa un pack de 35 kWh de capacidad.
Fuente | ShortsCar
