Prueba Eleglide C1 ST. Una bici eléctrica con motor central por poco más de 1.000 euros

Las bicicletas de motor central han sido hasta hace poco coto de los segmentos altos. Para llevarse una a casa había que «soltar la panoja». Pero los grupos chinos están avanzando de forma muy rápida, y como ejemplo la Eleglide C1 ST. Un modelo que logra un compromiso calidad/precio sin competencia.

El C1 está disponible en dos versiones, una con barra media y otra con barra baja, que es la que hemos probado y que destaca por permitir un acceso a la bici más cómodo, sin tener que hacer malabarismos tanto para subir como para bajar. Algo que agradecerán tanto las personas con alguna limitación de movilidad, así como aquellos profesionales que usen la bici para trabajar y tengan que subir y bajar de forma constante.

Link compra Eleglide C1 ST

No hay talla de bici a elegir, pero la C1 ST se adapta a una amplia variedad de alturas, desde los 1.50 metros hasta los 1.95 metros. Algo que facilita la altura del manillar, que nos proporciona una posición de conducción muy cómoda como es habitual en las ciclo touring.

Las ruedas son de 27.5 pulgadas de diámetro y 2,25 pulgadas de ancho, con una presión de aire óptima de 55 a 60 PSI. Los frenos de disco hidráulicos están bien ajustados y funcionan de forma firme y correcta. La horquilla de suspensión ofrece 100 mm de recorrido, y se puede bloquear girando la rueda azul ubicada en el lado superior derecho de la horquilla.

El cuadro es de aluminio y es bastante rígido, con unas buenas soldaduras, sobre todo el tubo inferior, donde esconde la batería. La batería está protegida contra la extracción accidental mediante una palanca de seguridad que hay que presionar al sacarla y también se puede bloquear con una llave.

El manillar se puede inclinar ligeramente hacia arriba, el sillín es bastante cómodo y las empuñaduras cuentan con un reposamanos aplanado, que según nuestra medida, puede resultar algo extraño y que tendremos que adaptar en su inclinación. Una bici que no es ligera, 25.5 kilos, lo que puede resultar un reto si tenemos que subir escaleras con ella.

La pantalla es de 1,8 pulgadas y es un panel LCD, lo que facilita su lectura incluso a pleno sol. Algo que se agradece frente a la tendencia de algunas marcas de ofrecer pantallas LED a color, que cuando les da algo la claridad dejan de verse. Esta pantalla cuenta además con un puerto USB-A, que se puede utilizar para cargar un dispositivo electrónico, como el móvil o la tablet.

La pantalla muestra información clave, como la velocidad, el nivel de asistencia (que va de 1 a 5), ​​el nivel de batería y el kilometraje total. Puede cambiar al kilometraje total presionando brevemente el botón de encendido, un detalle que no se menciona en ninguna parte del manual.

Un detalle a tener en cuenta es el de la iluminación. Y es que aquí hay, nunca mejor dicho «luces y sombras». Mientras que el foco delantero es sobresaliente, un sistema de dos LED potente, la parte negativa es que la luz trasera es un sistema a pilas. No está conectado a la batería, por lo que, además de tener que ponerle pilas, nos obligará a pulsar el botón lateral para encenderla, y no lo podremos hacer desde la pantalla como otros muchos modelos.

Eleglide C1 ST: Características, conducción

El fabricante del motor central de 250 W nominales (432 W pico) es Ananda, una empresa china. El M60 instalado es el motor de nivel de entrada de Ananda y proporciona un par de 70 Nm. Esta potencia suele ser suficiente para desplazamientos urbanos y recorridos más ligeros, pero si planeas afrontar subidas más pronunciadas o terrenos montañosos, es posible que quieras considerar un motor más potente, y más caro, o por lo contrario, tendrás que aportar más con tus piernas.

Si bien Ananda no es tan conocida en este país como marcas como Bafang, sus motores son cada vez más populares y se dice que son silenciosos y fiables.

Llama la atención que la respuesta de la asistencia es muy rápida. A diferencia de otros modelos de bajo coste, en este caso el sistema es capaz de detectar de forma muy rápida el inicio del pedaleo gracias a un sensor de movimiento. No es igual que un sensor de par, pero se trata de una alternativa de bajo coste que nos permite adaptar la potencia y velocidad según nuestro ritmo de pedaleo.

Durante las semanas que he probado la bici, he visto como el comportamiento de la asistencia es mucho menos constante que en un sistema control de par. El motor se activa principalmente (aunque no exclusivamente) en función de la cadencia. Esto te anima a cambiar de marcha de forma adecuada; si empiezas con una marcha más alta, recibirás mucha menos asistencia. Sin embargo, cambiar a una marcha más baja al principio proporciona una asistencia mucho más fuerte debido a la mayor cadencia.

Dependiendo del nivel de asistencia, la potencia adicional disminuye a determinadas velocidades. A velocidades más altas, el nivel de asistencia seleccionado (que va del 1 al 5) se vuelve crucial. Por ejemplo, mientras que la asistencia en el nivel 3 se siente excesiva a velocidades más bajas, casi desaparece una vez que superas los 18 km/h aproximadamente. Por lo tanto, si prefieres circular tranquilamente a unos 15 km/h, debes elegir el nivel 1 o 2; de lo contrario, te encontrarás acelerando demasiado rápido. Para mantener la asistencia a velocidades superiores a los 20 km/h, es necesario el nivel 5.

La conclusión es que la conducción de la C1 ST es muy cómoda. La posición es elevada y natural, lo que se suma a su cuadro bajo, que nos permite subir y bajar fácilmente. Además, la suspensión delantera absorbe muy bien las imperfecciones, y el cómodo sillín compensa la ausencia de un muelle en la zona trasera.

Eleglide C1 ST: autonomía real

La batería, con certificación IPX5 contra el agua, tiene una capacidad de 522 Wh (14,5 Ah) y 36 V. Está alojada en el tubo inferior de la bicicleta y se puede extraer fácilmente, por si queremos cargarla en casa o en la oficina. Eso si, la carga no es precisamente rápida, y para llegar al 100% desde cero necesitaremos 7.5 horas. Por suerte, su amplia autonomía hará que pocas veces necesitemos hacer el ciclo completo.

Según Eleglide, la batería debería proporcionar una autonomía de hasta 150 km. Esta cifra se obtuvo con un peso del conductor de 75 kg en una ruta recta y plana con un viento en contra mínimo y a una velocidad de solo 15 km/h. Como es habitual, la vida real puede ser diferente, aunque los resultados pueden variar según nuestro recorrido.

Para comprobar la autonomía real, he realizado un recorrido que ha mezclado tramos urbanos, entre tráfico, y recorrido interurbanos. Un trayecto con las constantes subidas y bajadas que tenemos en Galicia, que son todo un reto para cualquier vehículo eléctrico, que lograré mejores cifras en zonas llanas.

Antes de nada, indicar un detalle del sistema que controla el porcentaje de la batería. Y es que este puede variar de forma extraña. Iniciamos el recorrido con la batería al 94%, y tras recorrer 26 kilómetros, bajó al 48%. Lo más llamativo es que al volver a coger la bici un par de días después para continuar con la prueba, el marcador de a batería indicaba un 65%.

Esto puede deberse a una mala configuración del BMS, pero también a las habituales variaciones durante los primeros ciclos de vida de la batería, que necesita estabilizarse hasta ofrecer unas medidas más precisas.

Después de unos días circulando siempre en el máximo nivel de asistencia, el 5, y apoyando poco con las piernas, he logrado recorrer 75 kilómetros. Una cifra lejos de los 150 km que indica la marca, en condiciones óptimas, pero que puede situarse entre los 90 y 100 km si tenemos algo de cuidado, y aprendemos a usar los diferentes modos de conducción, o nos movemos por zonas más llanas.

¿Y cuánto cuesta la Eleglide C1 ST? Pues mucho menos de lo que pensaríamos, ya que este modelo de motor central está disponible por 1.249 euros. Precio que podremos reducir en 50 euros con el cupón NNNL107.

La podéis comprar directamente, os pongo el link más abajo, y recibir en casa en unos días desde su almacén en Europa.

Tienda | Eleglide C1 ST