Ecotricity, empresa responsable de instalar y mantener una extensa red de carga rápida multi-formato de vehículos eléctricos en las islas británicas, no encuentra la clave para satisfacer a los usuarios de la denominada Electric Highway. Todo empezó con la decision más que razonable de dejar de dar el servicio gratuitamente, cosa que recordemos que Ecotricity ha venido haciendo durante dos años. El problema ha venido con el nuevo precio del servicio y, sobretodo, del modo de facturación. 6 euros por cada 20 minutos de carga.
Los híbridos enchufables están siendo un éxito en el Reino Unido y son precisamente los más penalizados por este sistema de pago del servicio de carga dado que serán los vehículos que carguen más lentamente los que acabarán pagando más. El Mitsubishi Outlander, el híbrido enchufable más vendido en Europa y especialmente en Inglaterra sólo puede cargar a 15kW máximo en Chademo. Por otro lado, uno de los grandes perjudicados por duplicado es el Renault Zoe R240 porque sólo nos permitirá cargar a 22kW en corriente alterna trifásica y porque las estaciones de carga que pueden proveer de 22kW en AC son realmente baratas.En cambio, los BMW i3, Nissan Leaf o Tesla Model S/X con adaptador, pueden llegar a cargar hasta los 50kW aprovechando mucho más la tarifa.
Se levantaron voces muy críticas con la medida y la presión ha acabado por hacer rectificar a la productora y distribuidora de electricidad 100% renovable con una tarifa algo más beneficiosa, 7,2 euros por 30 minutos de carga. Justifican el cambio para evitar que los usuarios que carguen más de 20 minutos tengan que restablecer el proceso al acabarse ese tiempo y al ser 30 minutos la carga promedio. Al parecer, esa concesión sigue sin ser satisfactoria y no ha aplacado las voces críticas con la medida. Recientemente, Autocar ha publicado un artículo “El día en que la electricidad pasó a costar más que el diesel”. En él, se anima a Ecotricity a rediseñar su estrategia para evitar la pérdida de usuarios y, por ende, el impulso de la movilidad eléctrica.
Los británicos parecen obviar la solución a este problema, hacerse cliente de electricidad de Ecotricity, no tiene un sobrecoste excesivo y se contribuye a la instalación de molinos eólicos en el país. El modo de pago de una estación de recarga, especialmente rápida, genera mucha discusión y se puede encontrar de todo en el mercado: empresas que ofrecen tarifa plana, pago por kWh, pago por minuto, pago por un tiempo dado e incluso pago mixto.
El hecho es que se trata de una situación muy negativa para la movilidad eléctrica que el público asocie la recarga pública como algo más caro que los combustibles fósiles. Estamos seguros de que Ecotricity encontrará la tecla que contente a los usuarios y que les permita financiar una red vital para el desarrollo del vehículo eléctrico en el Reino Unido, una red que espera duplicar sus actuales 296 puntos de carga rápida en los próximos años.
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Fuente: CleanEnergyNews
