Actualización del proyecto del Scuderia-e. Un FIAT 500e con 56 kWh y cargador de 150 kW

Este pasado fin de semana hemos recibido una actualización del proyecto Scuderia-e. Para los que no lo recuerden o conozcan, es una iniciativa puesta en marcha por Gianfranco Pizzuto. Un italiano de ascendencia austriaca que desde la localidad de Salzburgo trabaja en una interesante modificación del pequeño FIAT 500 eléctrico.

Se trata de un 500 eléctrico al que cambiarán su batería. Un pack original de 24 kWh que cuenta con celdas prismáticas Samsung, y que son sustituidas por unas modernas celdas 18.650 de Sony. La mayor densidad energética de estas permite alojar en el pequeño espacio que dispone el 500e hasta 56 kWh.

El objetivo es demostrar el potencial de las modificaciones «artesanales» de coches eléctricos. Algo que permite sacar el máximo partido a la evolución de las baterías, y que permite algo tan llamativo como crear un 500 eléctrico que pasa de los 160 kilómetros de autonomía de fábrica, a nada menos que unos 400 km con el nuevo pack. Y todo sin apenas aumentar el peso, y ocupando el mismo espacio que la antigua batería.

Una de las claves de este trabajo es el uso de celdas cilíndricas. Esto ha permitido a Gianfranco y su equipo desarrollar un pack que a pesar de ser muy compacto, mejora aspectos como la refrigeración de la original. Entre cada celda hay un espacio de 2mm, que hace más fácil el fluir del aire que refrigera el sistema.

Como recordamos, el 500e de serie utiliza un sistema HVAC para la climatización del pack. Traducido, significa que usa el climatizador del coche para esta labor. Algo que se ha mantenido en esta versión, pero mejorando su rendimiento gracias precisamente al espacio que existe entre celda y celda. Un espacio que no había en el modelo de serie que recordamos usa celdas prismáticas. Un sistema que nos confirman trabaja para enfriar la batería, pero también para calentarla. De esa forma se mantienen sus prestaciones tanto en invierno, como en verano, además de alargar la vida útil de las propias celdas.

A pesar de todo, desde el equipo de Gianfranco están trabajando en nuevas soluciones para mejorar la refrigeración de la batería, y que esperan tener listo en los próximos meses una vez terminadas las pruebas.

Para la recarga finalmente se han mantenido el cargador original para las cargas monofásicas. Eso supone un cargador de Tipo 1 capaz de acceder a una potencia de hasta 6.6 kW. No han instalado un cargador de Tipo 2, y que explican tiene una razón económica. Para la carga rápida el equipo instalará una toma CCS Combo, que curiosamente estará alojada en el frontal del coche, justo donde hasta ahora se localiza el logo de FIAT. Un emblema que será sustituido por una tapa realizada con una impresora 3D y que mostrará el nombre de la Scuderia-E, y bajo la que se esconderá el puerto de carga rápida. Un cargador que recordamos será capaz de acceder a potencias de hasta 150 kW y 400V.

El objetivo es tener el coche listo para su gran prueba de fuego. Recorrer los 2.130 kilómetros entre Bolzano y Oslo en 24 horas. Un duro test que tendrá lugar el próximo 21 de junio.

Un proyecto que recordamos abre las puertas a otro tipo de configuraciones. Desde la Scuderia-E se ofrecerán packs de menores capacidades, como uno de 40 kWh, pensado para los que no necesiten tanta autonomía, y al mismo tiempo quieran disfrutar de un 500 eléctrico con más alcance que el original, y con un peso más reducido. Ingredientes perfectos para un coche muy divertido de conducir.

Para terminar, comentar que hemos preguntado a Giafranco sobre las posibilidades de hacer esto mismo en otros coches eléctricos del mercado. A esto nos ha respondido que a nivel técnico sería factible, pero el único problema sería la necesidad de programar un BMS para cada modelo. Algo que supone un coste económico y que propone solucionar con un crowdfunding entre aquellos interesados en actualiza la batería de su coche con uno como la del 500e.

Fuente | Scuderia-E