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Tesla comienza a examinar las posibles localizaciones de su Gigafábrica de Europa

La pasada semana conocíamos la noticia de que Tesla había seleccionado a Alemania como emplazamiento para su Gigafábrica en Europa. Un rumor que en las últimas horas se está reforzando por las novedades que llegan y que indican que los directivos del fabricante norteamericano incluso ya estarían sobre el terreno inspeccionando potenciales lugares para albergar las instalaciones.

La idea de los americanos es instalarse en el corazón industrial alemán. De esa forma habrían visitado lugares como Renania del Norte-Westfalia, así como la Baja Sajonia. Esta última posibilidad que incluso ha sido comentada por el Ministro de economía del estado federal, Bernd Althusmann.

De esa forma Tesla se implantaría en una región donde podrá acceder al que para muchos es el mejor ecosistema para fabricar coches en Europa, con grandes infraestructuras, comunicaciones, y la mano de obra cualificada que necesitará este tipo de instalaciones altamente automatizadas. Unos emplazamientos que además se situarán dentro o muy cerca de los principales mercados del coche eléctrico en Europa.

Renania del Norte-Westfalia, el estado más poblado de Alemania, comparte fronteras con los Países Bajos y Bélgica. Baja Sajonia comparte frontera con los Países Bajos. A esto se añade la cercanía con los principales puertos europeos, como el de Róterdam, a menos de 300 kilómetros de distancia. Algo que facilitará tanto la exportación a otros mercados, como la importación de elementos como las baterías, que seguirán siendo producidas fuera de Europa de momento.

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El impacto de esta instalación será muy importante para Tesla, y también tendrá su efecto en todo el sector del coche eléctrico. Para empezar Tesla se ahorrará los costes logísticos de enviar desde la lejana California. A esto se añadirá unos plazos de entrega mucho más cortos, y también el poder sortear los aranceles de entrada en Europa. Un aspecto que parece cada vez más importante a la vista de la interminable guerra comercial que no parece tener fin.

Con estos elementos Tesla podrá contar con un coste más competitivo, lo que sin duda redundará en mayor competencia y la obligación del resto de marcas de apretarse el cinturón para no quedarse atrás.

Una planta cuya localización Tesla tendrá que decidir antes de que finalice este mismo año, y que el fabricante americano quiere que su desarrollo y construcción siga el rápido ritmo de la Gigafábrica 3 de China, la cual se está construyendo en la actualidad y que apenas ha necesitado 10 meses para su finalización.

Algo difícil de lograr en Europa, con mayores requisitos burocráticos. A pesar de esto, los rumores indican que la fábrica estará lista para funcionar en 2021, por lo que los de Elon Musk tienen por delante apenas 24 meses para desarrollar todo el proceso.

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