Seguramente que como yo, muchos de vosotros estáis muy atentos a los movimientos en el mercado de segunda mano de coches eléctricos. Algunos interesados en comprar, otros simplemente por curiosidad de ver como evoluciona el sector. Uno de los modelos más deseados es también uno de los que más cambios está sufriendo. Hablamos del Tesla Model S que se acerca a unos precios casi al alcance de la mayor parte de los bolsillos. Pero, ¿merecen la pena o es mejor seguir esperando?.
En la actualidad si miramos en mercado europeo, vemos que para hacernos con una unidad del Tesla Model S de primera generación, 2013-2014, los precios no han sufrido una bajada tan importante como podríamos esperar. Estos se han situado en el caso de los Model S 85 de menos de 150.000 kilómetros un coste en torno a los 40.000 euros. Una cifra que supone casi tres veces menos su precio original.
Pero si echamos un repaso a la segunda línea de batalla, aquellos modelos matriculados a partir de 2015, vemos que la diferencia no es demasiado grande. De esa forma podemos encontrar algún Model S 70D (387 km autonomía EPA) que además de un interior con un nivel de acabados superior, añade el para muchos imprescindible Autopilot, y cuyos precios arrancan en los mismos 40.000 euros. Si queremos un 85 de estas características tampoco tendremos que rascarnos algo el bolsillo, con unidades desde 45.000 euros. Como vemos, diferencias que no son demasiado grandes respecto a los modelos de primera generación.
A esto hay que añadir la llegada en cada vez mayor número del Tesla Model 3, y más concretamente de su versión Standard Range Plus. Una situación que provoca que a nivel de autonomía no haya demasiada diferencia entre un Model 3 SRP, con sus 387 km EPA, y un Model S 85, que homologa 427 km EPA pero una cifra que logra al estrenar y que con el paso de los kilómetros se habrá reducido ligeramente.
En contra del precio de ocasión del Model S juegan factores además de la llegada del Model 3, la también el desembarco de cada vez más unidades del propio Model S al mercado de ocasión provocado precisamente por el cambio de muchos al nuevo modelo. También añadimos a los factores que ayudarán a la bajada la renovación del propio S, que en las próximas semanas recibirá una versión que como es habitual vendrá acompañado por novedades interesantes.
Esto nos lleva a pensar que las unidades más antiguas, las del 2013, con todavía dos años por delante de garantía en el sistema de propulsión y baterías, podrían ver como sus cifras caen por debajo de los 35.000 euros ya este mismo año. Incluso podrían situarse por debajo de los 30.000 euros ya durante el primer trimestre de 2020, con unidades en torno a los 25.000 euros para el próximo verano. Y es que para entonces la garantía de batería y sistema de propulsión tendrán solo un año por delante, por lo que habrá que sacárselos de encima lo más rápidamente.
Si lo que buscamos es un modelo del 2015, con Autopilot y por debajo de los 150.000 kilómetros, entonces siguiendo esta misma estimación, en este caso una depreciación algo menor al ser unidades más nuevas, deberíamos ver a finales de este año 2019 unidades por unos 35.000 euros, y a lo largo del primer semestre de 2020 por debajo de los 33.000 euros.
Cifras que sin duda animan a optar por uno de los modelos más icónicos del mercado del coche eléctrico, y el coche de los sueños de más de dos por aquí.
