La búsqueda de alternativas de movilidad personal está permitiendo la recuperación de algunos proyectos e ideas que nos proponen una movilidad personal y eficiente en tiempos donde la distancia social ha pasado a formar parte de nuestro diccionario. Una era que ha visto explotar el interés en iniciativas como el Echo3. Un triciclo eléctrico con habitáculo cerrado y pensado para movernos por zonas urbanas.
Este fabricante radicado en Colorado, Estados Unidos, ha presentado un diseño extremadamente sencillo y efectivo. Un modelo que destaca por contar con un habitáculo cerrado, lo que permite un uso más cómodo en temporadas de lluvia o frío, y que puede acoger hasta 3 pasajeros.
No conocemos la potencia de su motor, pero si que la velocidad máxima estará limitada a 56 km/h, y que la autonomía podrá llegar a los 89 kilómetros con cada carga dependiendo del pack seleccionado, necesitando hasta 5 horas para una carga completa.
Unas autonomías que según el fabricante permiten cubrir sin problemas los desplazamientos habituales que en Estados Unidos según la marca es de 26 kilómetros diarios. Un vehículo que permitirá cubrir trayectos como el de realizar la compra, que se podrá realizar de forma más fácil gracias al pequeño tamaño y maniobrabilidad del vehículo.
Aspectos a los que añaden el bajo coste operativo de un vehículo extremadamente eficiente, pero que no renuncia a un equipamiento entre el que destacan elementos como conectividad bluetooth, para una acceso sin llave, techo solar, llantas de aleación, espacio en el maletero, climatizador opcional…etc.
Una propuesta que parece encajar especialmente bien con los sistemas de car sharing, que podrán tener en esta alternativa una opción de bajo coste ya que está a la venta con un coste de 6.995 dólares, unos 6.100 euros al cambio.
Un vehículo que sus desarrolladores indican ha vivido un impulso definitivo provocado por la crisis del COVID-19 que ha disparado la búsqueda de un transporte limpio, eficiente y asequible, principalmente después de que millones de personas hayan comprobado de primera mano como sería el aire de sus ciudades sin la presencia de vehículos con motor de combustión.
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Fuente | Echo3
