Según la Agencia Internacional de la Energía las ventas mundiales de coches eléctricos aumentarán un 28% al año hasta 2030
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Publicado: 16/03/2021 10:59
La Agencia Internacional de la Energía ha publicado un informe donde hace una estimación del crecimiento que tendrán las ventas de coches eléctricos en el mundo hasta el año 2030. Un análisis que nos muestra el avance de una tecnología que no para de evolucionar y que se acerca a su punto de inflexión.
Las conclusiones de este informe indican que las matriculaciones de coches eléctricos a nivel global crecerán un 28% anual a lo largo de la próxima década. Unos datos que supondrán que para 2025 la flota total de coches en la carretera rondará los 100 millones, llegando a los 250 millones para 2030, momento en el que estiman se venderán unos 44 millones de coches eléctricos al año.
Unas estimaciones que tienen en cuenta ventas de coches eléctricos puros e híbridos enchufables, que nos muestran que el grueso de las ventas recaerán en los eléctricos a batería frente a unos enchufables que se mantendrán como una opción muy por debajo en cuanto a ventas.
Al mismo tiempo desde la agencia indican que estos datos pueden ser incluso demasiado conservadores, dado el endurecimiento de las normativas sobre emisiones a escala mundial y el abaratamiento de elementos clave como las baterías, que hará que los coches eléctricos vayan aumentado su autonomía y reduciendo sus precios. Una combinación crítica para convencer a un elevado número de compradores.
Algo que según los expertos sucederá cuando el coste de las baterías en pack empiecen a bajar de los 100 dólares el kWh. Una cifra que está cerca de ser alcanzada, se sitúa según Bloomberg en los 137 dólares, después de que en 10 años este haya logrado bajar de los 917 dólares el kWh en 2010.
Según el informe: «En China, que ya encabeza la producción de baterías, el precio de las mismas para algunos vehículos ya ha alcanzado el límite de 100 dólares, varios años antes de lo previsto; y se prevé que disminuya por debajo de 60 dólares hacia 2030«.
La agencia también avisa a aquellos tentados con tomar una vía más conservadora: «Con independencia de si son fabricantes de coches tradicionales o compañías emergentes, las compañías que puedan acogerse al cambio estructural e introducir estos avances con rapidez tendrán más opciones de ganar a largo plazo«.
El final de los motores de combustión
Aunque las estimaciones de cuándo se producirá el adelantamiento de los sistemas eléctricos a los de combustión de momento son muy diversas, donde si parece existir un acuerdo casi total es en que los motores diésel y gasolina funcionando de forma individual tienen los años contados.
La opinión pública acerca de los combustibles fósiles, las políticas estatales y la velocidad de la innovación han cambiado la percepción del público y han acelerado el despliegue de los eléctricos. La curva de adopción se ha pronunciado en los últimos cinco años, parcialmente gracias a los incentivos estatales y al endurecimiento de las normativas sobre emisiones para los coches de combustión mediante gasolina, pero también por cuestiones como la pandemia, que ha aumentado la preocupación de millones de personas por la contaminación.
Desde la Agencia también se analiza quién será el ganador de esta carrera. El resultado será que los mercados que más fuerte han apostado por el coche eléctrico y que han puesto en marcha normas sobre emisiones más exigentes serán la referencia. Y estos serán China y Europa, que recogerán los frutos de esta apuesta al convertirse en los principales centros mundiales de producción de coches eléctricos, no sólo para el consumo interno sino también a medio y largo plazo para la exportación.
Una victoria que se extenderá también a los sectores relacionados con el coche eléctrico, como es la producción de baterías, cuya tendencia será asentarse cerca de las fábricas de coches, y otros componentes eléctricos, además de incentivar sectores como el desarrollo y fabricación de puntos de recarga, e incluso el desarrollo de software para los futuros coches autónomos.
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Vía | CM