El coche eléctrico gracias a su evolución en aspectos como autonomía y mejora de la carga rápida se ha convertido en una herramienta muy potente en sectores como el taxi. Ahora, el operador de taxis más grande de Indonesia, Blue Bird, ha confirmado su transformación con la adquisición de cientos de unidades que les permitirá contar con un 80% de coches eléctricos en su flota.
Para ello, Blue Bird ha llegado a un acuerdo con el fabricante chino BYD que se encargará de la entrega del grueso del pedido de 500 unidades que transformarán la flota de esta empresa.
Una de las curiosidades del acuerdo es que este supondrá cancelar, o rediseñar drásticamente, el acuerdo firmado el pasado año con Tesla, que era la seleccionada para este pedido.
Pero al parecer el menor coste de los modelos de BYD ha llevado a la empresa a dar un giro sobre la marcha y cambiar a los americanos por el gigante chino.
Un ejemplo de la gran progresión que están logrando los grupos automovilísticos chinos, que incluso ya son capaces de desplazar a Tesla de grandes acuerdos de venta de la mano de una gama cada vez más competitiva y económica.
Esto tiene que ver también con el aspecto político, ya que Indonesia se ha convertido en un objetivo del China para obtener los recursos necesarios para la producción de baterías, ya que el país asiático cuenta con una de las mayores reservas mundiales de níquel.
Por su parte el gobierno indonesio quiere que la industria de producción de baterías se desarrolle dentro de sus fronteras, para lo que ha puesto en marcha medidas de incentivos para levantar grandes fábricas de baterías para coches eléctricos.
Unas sinergias económicas y políticas donde China puede sacar partido a su influencia, de la mano de una industria del coche eléctrico que se está comiendo el mercado sin parar.
