Think no encuentra comprador, y podría cerrar a finales de este año

Desde hace muchos meses el fabricante noruego Think ha estado bajo la protección del proceso de bancarrota a la búsqueda de un inversor que salvase el proyecto, un mecenas que parecía llegaría de Rusia, pero que con el paso del tiempo se ha ha ido desinflando.

Ahora vemos en diferentes medios, como la página de fans de Think, la web Greencarreports y algunos medios noruegos, como parece que los propios empleados de Think han confirmado que ante la falta de un inversor se abre más que nunca la posibilidad del cierre definitivo y la paralización de la producción de un modelo que no ha encontrado su lugar en el mercado.

Según varios miembros del club de fans de Think, la falta de un inversor supondrá que a finales de este mismo año la poca actividad que hay en la empresa podría paralizarse totalmente, algo que ha supuesto una alarma para aquellos que necesitan un soporte técnico de un fabricante que a pesar de todo, ha seguido atendiendo a sus pocos clientes pero que ahora podría enfrentarse a su momento más complicado.

Otra señal de que las cosas podrían estar cerca de su final, es el cambio de inquilino de las instalaciones de Think en la localidad Noruega de Aurskog, la base de Think desde su fundación en 1991 y que ha sido entregada por el ayuntamiento a una fábrica de bebidas.

Está claro que la situación de bancarrota no puede eternizarse y en algún momento Think tendrá que dar un paso en una u otra dirección, y todo hace indicar que a la vista de la competencia y los pocos recursos de Think para innovar, ese paso será irremediablemente hacia la desaparición.

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Fuente | Greencarreports