La guerra por hacerse con el segmento de bajo coste no da tregua en China, y después del éxito del lanzamiento del BYD Seagull, ahora es el fabricante JMC el que ha contraatacado con una propuesta incluso más económica. El Little Kylin.
Se trata de un pequeño urbano de cinco puertas y 3.5 metros de largo y 4 plazas, que destaca por un diseño exterior bastante competente con ciertos aires europeos, principalmente en la parte delantera.
En el interior, nos encontramos un volante de tres radios con la parte inferior plana, pantalla frontal LCD y un panel LED central de 9 pulgadas. Un conjunto sencillo y funcional donde todavía encontramos controles físicos, como el control del aire acondicionado por ruedas como en los viejos tiempos.
Entre el equipamiento encontramos elementos como frenos ABS, distribución de la fuerza de frenado EBD, asistente de ascenso HDC, airbag principal del conductor, alarma de presión de los neumáticos, radar de estacionamiento trasero, faros halógenos/ ajuste de altura de los faros, eléctrico elevalunas, aire acondicionado manual, etc.
El JMC cuenta con un sencillo sistema de propulsión con un pequeño motor 26 KW (35 CV) y un par máximo de 84 Nm, que le impulsan hasta una velocidad máxima de 100 km/h. La batería por su parte es un pack de litio-ferrofosfato de 15,8 kWh, que le proporcionan una autonomía de 201 kilómetros bajo el ciclo CLTC.
Lo mejor sin duda es que este modelo ha salido a la venta en China por 49.900 yuanes, que al cambio son apenas 6.300 euros. Una cifra que le colocan un 32% por debajo del precio de inicio del BYD Seagull, un modelo algo más grande, potente y con más autonomía, 305 km CLTC.
Un nuevo ejemplo de que la velocidad que ha tomado el mercado del coche eléctrico en China tiene fundamentos sólidos, con propuestas cada vez más económicas y competitivas en diferentes aspectos, tanto de diseño, como calidad y prestaciones.
