Tras años de ausencia de un elemento importante cuando el frío aprieta como es el volante calefactable, Tesla finalmente ha decidido incorporar de serie este elemento en su Model Y. Un coche eléctrico que por precio debería haber tenido esta funcionalidad desde su lanzamiento.
Al igual que el Model 3, el SUV más pequeño de Tesla carecía hasta ahora de un volante capaz de aportar un poco de calor en las manos, que en invierno ayuda a reducir la sensación de frió cuando nos subimos a un coche a temperatura ambiente.
Esta opción se ha convertido en un estándar de cualquier coche premium, segmento al que pertenecen el Model Y y el Model 3 por precio.
Según las primeras imágenes aparecidas en las redes sociales gracias a la cuenta The Kilowatts, en la pantalla donde se gestiona toda la climatización del Tesla Model Y, en su versión Standar Range aparece la nueva opción para activar o desactivar la calefacción del volante.
Contar con esta posibilidad ayuda mucho a los usuarios que utilizan sus vehículos eléctricos en climas espacialmente fríos y temperaturas bajo cero. El uso de los asientos y volante calefactables reduce el consumo de energía, en comparación con el uso de la calefacción, aportando un confort térmico que, en determinadas circunstancia, permiten no usar la climatización del habitáculo lo que incrementa el rango del vehículo. Aspecto que quedó constatado recientemente durante la prueba de consumo de FCE.
Un volante caliente ayuda a recuperar la sensación térmica después de una recarga bajo la lluvia en un frío invierno, o tras haber quitado la nieve del coche. Para quienes no les guste este elemento siempre esta la posibilidad de no accionar la resistencia del volante.
Por el momento se desconoce desde cuánto tiempo lleva Tesla incluyendo el nuevo volante en sus coches, así como si aquellos fabricados en los últimos meses cuentan con esta función que se activaría, hipotéticamente, mediante una actualización OTA.
La llegada del volante calefactable al Model Y, implica que no tardando mucho este mismo elemento pude ser equipado en la berlina Model 3. Tesla lleva varios meses actualizando sus modelos con cambios de detalle en un mix un tanto confuso entre su fábrica de Fremont y la de China.
En unos meses el equipamiento de la gama más baja de Tesla debería ser equiparable, independientemente de dónde se fabrique el coche, salvando la diferencia de las celdas de sus baterías donde hay una diferencia importante, según dónde se fabrica cada unidad.
