Polestar atraviesa una situación que parecía delicada, ante las noticias de despidos (unos 450 empleados, el 15% de su plantilla global) a principios de año, ante la revisión a la baja de sus previsiones de ventas, así como la desinversión de Volvo, pasando del 48,3 al 18% en la propiedad de la compañía.
La desaceleración de la demanda y las «condiciones desafiantes del mercado» no es ajena a marcas como la sueca, que sigue con su previsión de ir lanzando nuevos modelos en los próximos años. A diferencia de lo que hacen el resto de marcas, cada nuevo modelo es numerado de forma consecutiva, y no por tamaño.
Solo así podemos entender de partida que el director ejecutivo de la marca, Thomas Ingenlath, haya anunciado que el Polestar 7 será el sustituto en el futuro del actual Polestar 2. Este último, a la venta como berlina eléctrica con tintes crossover para el segmento D (4,61 metros de largo), tiene los próximos años garantizados, sobre todo después de su reciente actualización.
Se lanzó al mercado en 2020 y es uno de los eléctricos más vendidos en todo el mundo, con más de 150.000 unidades matriculadas en los 26 mercados a los que llega en todo el mundo. Su fecha de caducidad es el 2027 y, tal como acaba de anunciar su CEO, no tendrá un sustituto como tal.
Ingenlath, en declaraciones para Autocar, no ha confirmado qué tipo de vehículo ocupará su hueco, pero sí que será sustancialmente diferente y que tomará su lugar en el mercado: «Qué tipo de automóvil y cómo lo haremos, lo discutiremos cuando llegue el momento. Por mucho que podamos construir un coche similar, debido a que tiene un número diferente, no caeremos en la trampa natural de quedarnos atrapados en ese concepto».
El abanico de posibilidades es muy amplio. Recordemos que el primer Polestar fue un coupé con tecnología híbrida enchufable. Tras el Polestar 2, los nuevos SUV ‘3’ y ‘4’, son los siguientes, este último con una carrocería marcadamente coupé. El futuro Polestar 5 ya ha sido cazado sin camuflaje: será una berlina deportiva que rivalizará directamente con el Porsche Taycan. El Polestar 6, que no se espera hasta el año 2026, será un nuevo deportivo eléctrico que promete ser todo un éxito, sobre todo tras lo visto con la edición especial de lanzamiento LA Concept Edition desvelada en Pebble Beach.
Lo que parece claro es que el Polestar 7, que no llegará nunca antes que el ‘6’, cambiará la actual plataforma modular CMA derivada de Volvo, y que da vida al antes mencionado Polestar 2, por una nueva arquitectura del grupo Geely al que pertenece. Se habla ya de una variación de la plataforma SEA que sustenta el Polestar 4, un SUV que ofrece ya hasta 600 kilómetros de autonomía eléctrica.
Respecto a las noticias de la reducción de participación de Volvo en Polestar, así como de la nueva inversión de 950 millones de dólares en financiación externa, el CEO de la marca ha querido calmar las aguas. «No es una situación dramática», afirmando que la situación con Volvo estaba ya planeada desde hace tiempo. Ingenlath confía, además, en conseguir los 350 millones de dólares que todavía necesitan para finalizar el desarrollo y los planes de producción de sus futuros modelos.
«Hemos logrado mucho. Por supuesto, estamos seguros de que lograremos gestionar lo último que queda. No somos BYD, no somos Tesla, no tenemos fábricas ni volúmenes que lleguen a millones. Tenemos un público objetivo Premium y de lujo muy claro y una cartera que se adapta a eso. No estamos en el juego del volumen del mercado masivo», remata el CEO de Polestar.
Fuente | Autocar
