Después de la presentación del coche el pasado mes de abril, esta semana ha llegado el momento de completar las primeras pruebas con el Volkswagen I.D R. Un espectacular monoplaza que tiene como objetivo llevarse la victoria en la mítica subida al Pikes Peak.
El encargado de pilotar este modelo será el francés Romain Dumas, que ha podido realizar las primeras tomas de contacto en el circuito que el próximo día 24 de este mes de junio decidirá quién es el ganador de esta nueva edición.
Según Dumas, la experiencia de conducir un coche eléctrico es totalmente diferente. Ha notado el efecto de disponer del par de forma lineal, lo que le permite salir de las curvas disparado sin esperar a que el motor logre las revoluciones necesarias. Además también ha disfrutado de la ausencia de cambio de marchas, y de ruido.
Por delante tendrá una subida de 19.9 kilómetros con 156 curvas en la que se enfrentará a un trazado temible, con caídas realmente aterradoras, y también a unas cambiantes condiciones climatológicas que pueden afectar al rendimiento de los vehículos que deben ascender en pocos minutos un total 1.453 metros de altitud hasta el pico situado a 4.301 metros sobre el nivel del mar.
Para lograr alcanzar la victoria, Dumas tendrá a su disposición un verdadero misil sobre ruedas. El I.D R cuenta con un sistema de propulsión formado por dos motores que generan un total de 500kW (682 CV) y 650Nm, que tienen que mover un cuerpo que en total apenas llega a los 1.100 kg. Gracias a esto, el fabricante indica que el ID será capaz de acelerar hasta los 100 km/h en apenas 2.25 segundos, más rápido que un Fórmula 1.
El objetivo para el experimentado piloto francés es superar el récord existente en la categoría de coches eléctricos, 8:57.118, y de esa forma tratar de acercarse lo máximo posible a la cifra en categoría general que ha dejado en 2013 Sebastian Lobeb, 8:13:878.
La cita, el próximo 24 de junio en las montañas de Colorado Springs.
