Más de la mitad de la energía producida el pasado mes de mayo en nuestro país ha procedido de las energías renovables. Un nuevo hito que se produce en plena expansión de la tecnología que poco a poco está arrinconando en la irrelevancia a sectores como el carbón.
Según los datos preliminares publicados por el operador de red español Red Eléctrica de España (REE) han puesto sobre la mesa la evolución de nuestras renovables en su totalidad, incluyendo la eólica, solar fotovoltaica, solar térmica e hidráulica, han producido el 50,7% de la electricidad de España en mayo.
Esto quiere decir que más de la mitad de la energía producida en mayo ha sido renovable, pero la cifra llega al 73,3% del total si añadimos aquellas tecnologías que no emiten CO2 directamente, como la nuclear.
Otro dato que nos indica que la situación está todavía en una fase de crecimiento, es que el incremento de la participación de las energías limpias ha crecido un 10% respecto al pasado año, un año especial por las circunstancias de la pandemia, pero que es que incluso estas han crecido un 4.5% respecto al pasado mes de abril de este mismo año. Una marcha imparable.
Energías renovables en España: mayo 2021
Por tecnologías, la eólica fue el mayor contribuyente de todas las fuentes de generación en nuestro país el pasado mes, entregando un total de 4.794 GWh, un 20.9% más que el mismo periodo del año pasado, y logrando una cuota del 23,4%, seguida de la nuclear, con un 21.4%, mientras que el gas mediante los ciclos combinados es la única fuente fósil que resiste el empuje con un 10.9%.
Unas cifras que en pocos años se quedarán pequeñas gracias al inicio de la expansión de las instalaciones eólicas marinas, como la que ayer ha anunciado Iberdrola que supondrá la instalación de un parque eólico en la costa de Galicia de 1.000 MW y 1.000 millones de inversión, en una iniciativa que espera llegar a los 3.000 MW incluyendo proyectos en otras partes del país.
Llama la atención el imparable crecimiento de la fotovoltaica, que después de unos años en el ostracismo y con cifras que apenas llegaban al 1 o 2%, ha ido creciendo a un ritmo acelerado y en mayo ha cerrado ya con una cuota del 11.4%. Y eso a pesar de las dificultades de las empresas eléctricas a la hora de dar de alta sistemas de compensación de excedentes de las instalaciones residenciales que dejan miles y miles de tejados infrautilizados.
A pesar de esto, la solar fotovoltaica generó en mayo 2.331 GWh, un 42,4% más que en mayo de 2020. Algo que supone la mayor cantidad de electricidad generada en un mes por esta tecnología desde que se cuenta con registros a nivel nacional (2007). Según los datos provisionales disponibles hasta el 29 de mayo, se registró el máximo de generación solar fotovoltaica diaria (89 GWh) y la mayor cuota de esta tecnología, que alcanzó el 14,7% del total de la jornada.
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Sin duda la otra gran noticia es la caída imparable del carbón. Esta contaminante fuente de energía apenas ha ocupado el 1.6% de la producción, y su cuota anual cae hasta el 1.5% entre enero y mayo. Una señal de que no pasará mucho tiempo hasta su total desaparición. Algo que luego tendrá que se acompañado por el inicio también del adiós a los ciclos combinados por gas.
Factores que entierran de forma definitiva el mito de que recargar un coche eléctrico en España contamina, ya que como vemos la aportación de carbón en simbólica, e incluso podemos añadir que en las horas más recomendadas para cargar un coche eléctrico, por las noches, la aportación de fuentes como la eólica cubre gran parte de la demanda, por lo que el proceso es todavía más limpio.
Algo que tecnologías como la solar fotovoltaica, las baterías de respaldo o el hidrógeno permitirán poco a poco extender también al día y hacer que cargar nuestro vehículo sea no sólo limpio, sino también cada vez más económico con la caída del carbón y el gas.
