Según el jefe de I+D en Volkswagen, Ulrich Eichhorn, la expansión de las ventas de coches eléctricos en la próxima década será tan intensa, que se corre el riesgo de que el suministro de baterías no sea suficiente. Un factor que podría lastrar la producción, y con ello las ventas.
Para el ejecutivo alemán, basándose en los datos del propio fabricante, que indica que un 25% de sus ventas estarán protagonizadas por coches eléctricos para 2025, esto supondría la necesidad de unos 200 GWh cada año. Una cifra que supondría multiplicar por 5 la capacidad de la Gigafábrica de baterías de Tesla.
Pero esto sería sólo para atender la demanda del grupo Volkswagen. Según las estimaciones de los técnicos de VW, si todos los fabricantes contases con un objetivo de cubrir el 25% de su producción con coche eléctricos, eso supondría la necesidad de alcanzar un nivel de 1.5TWh. Cuarenta veces la capacidad de la Gigafábrica de Tesla.
Una de las soluciones que ayudarán a minimizar este problema, será el incremento de la densidad energética de las propias baterías. Entre estos nuevos desarrollos destaca el electrolito sólido. Una prometedora tecnología que fabricantes como Samsung ya han puesto fecha de llegada al sector del coche eléctrico, y que permitirán almacenar la misma cantidad de energía en menos espacio. Algo que permitirá reducir la necesidad de tantas fábricas.
La propia Volkswagen está trabajando en nuevas químicas, que permitan mejorar en todos los aspectos las baterías, incluyendo además de la densidad energética, también una vida útil que esperan llegue al menos hasta los 10 años. Pero desde el fabricante reconocen que estos adelantos necesitarán al menos 15 años para convertirse en una realidad comercial.
A pesar de todo, la propia Volkswagen ha estado investigando en el sector del coche eléctrico durante 50 años, y están convencidos de que su tiempo ha llegado, independientemente de la posible falta de baterías para cubrir la demanda global. Una producción que lo normal es que se incremente según lo haga la demanda, y que abre un nuevo nicho de mercado donde los fabricantes tendrán que pasar de simples compradores, a diseñadores y fabricantes de sus propias baterías.
Y para eso hacen falta…fábricas de baterías.
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