Según un estudio de la consultora IHS, la recarga rápida de coches eléctricos tendrá un importante impulso en los próximos años a nivel global gracias a la expansión de los motores eléctricos entre las gamas de los grandes fabricantes, y así pasaremos de las 5,900 estaciones que habrá a finales de este 2013, hasta casi triplicarse en 2014 con unos 15.200 puntos de recarga.
Pero la verdadera explosión llegará a finales de la década, y de esa manera se espera que para el 2020 existan en el mundo un total de casi 200.000 untos de recarga rápida, una infraestructura pensada para atender las necesidades de un parque móvil que no parará de crecer con la llegada de nuevas baterías y la popularización de los precios.
Para el portavoz de IHS el tiempo de recarga sigue siendo uno de los grandes obstáculos a superar por el coche eléctrico y junto con sus elevados precios son las dos principales razones que están evitando una expansión de la tecnología a un nivel masivo, un aspecto donde los puntos de recarga rápida jugarán un papel primordial en los próximos años al permitir la recuperación de la carga en pocos minutos.
Al mismo tiempo desde IHS se remarca la importancia de la educación de los consumidores y lo primordial de recordarles los cambios que el salto a la movilidad eléctrica conlleva, no sólo las partes buenas si no también poner sobre la mesa las que supondrán una mayor diferencia respecto a los modelos con motor de combustión, especialmente los mencionados tiempos de recarga.
Ponen como ejemplo la hasta el momento exitosa estrategia de Tesla que se ha apoyado de forma muy importante en la creación de una red de supercargadores que además serán gratuitos para los compradores de esta primera generación, unos puntos con unas elevadas potencias que además cuentan con el aliado de la sostenibilidad al estar alimentados por energías 100% renovables.
Vía | IHS
