EL pasado mes de marzo la división premium del grupo Hyundai, Genesis, presentaba el que sería su primer coche eléctrico. Un modelo que ha pasado algo desapercibido pero que cuenta con argumentos para ser uno de los favoritos de los compradores del segmento premium en los próximos años. Un modelo que ha comenzando sus primeras pruebas donde adelanta su ambiciosa propuesta.
Uno de los primeros en poder probar una unidad de pre-serie ha sido la revista británica Autocar. Una primera toma de contacto que pone sobre la mesa aspectos como la excelente genética de la propuesta en el aspecto mecánico, al heredar las características de los modelo E-GMP de Hyundai-KIA, y añadiendo un extra de calidad general. Todo en un cuerpo además más compacto. Algo que puede ayudar a convencer a muchos que no buscan un modelo tan grande.
En el aspecto físico es donde encontramos una de las primeras diferencias, y es que el Genesis GV60 mide 4.51 metros de largo, lo que supone 16.5 centímetros menos que el KIA EV6, o 23 centímetros menos que un Tesla Model Y. Un menor tamaño que le facilitará entrar en las plazas de garaje, pero también penaliza su capacidad en la zona de carga que se queda en 432 litros en el maletero trasero, más los 20 litros del delantero. Un GV60 que se coloca por tamaño a la altura del Audi Q4 etron.
El diseño es redondeado y muy elegante, a pesar de que el color seleccionado sea bastante estridente. Una cuestión de gustos donde las preferencias personales dictarán sentencia. Pero está claro que en el aspecto, el grupo coreano se ha puesto las pilas diseñando un tridente sin apenas fisuras entre sus tres marcas.
El interior destaca por su nivel de calidad, que para el probador está por encima incluso de la gama de coches de la propia Genesis. Un espacio donde encontramos más botones físicos, un volante más grueso y deportivo, y el salpicadero flotante con sus enormes pantallas como en los EV6 y IONQ 5. Un espacio que se diferencia de sus hermanos también por la presencia de detalles como el cuero de napa azul, que ofrece una sensación de lujo.
Una calidad general que se combina con una configuración mecánica heredada de sus hermanos del grupo, que le permiten situarse en la parte más alta de la oferta.
La unidad probada ha sido la más potente y costosa. La Sport Plus que viene dotado además de la arquitectura de 800V capaz de acceder a puntos de hasta 350 kW, también de un sistema de propulsión explosivo donde dos motores suman nada menos que una potencia de 320 kW (435 CV) que activando la opción «Boost Mode» incrementará la potencia hasta los 360 kW (489 CV) y el par a 700 Nm durante 10 segundos, permitiéndole hacer el 0 a 100 km/h en menos de 4 segundos.
Un GV60 que montará solo el pack de 77.4 kWh, que le proporcionarán una autonomía entre 466 y 470 kilómetros según versión.
El resultado es una alternativa con el nivel premium de los alemanes, las prestaciones dinámicas de un Tesla, y un tamaño algo más compacto. Una mezcla casi perfecta donde solo el precio puede ser un obstáculo ya que esta versión tope de gama costará en España unos 70.000 euros.
Un precio que en su variante más económica arrancará en los 56.370 euros, versión Sport, con una potencia de 234 kW (318 CV) tracción total y 470 km de autonomía.
Una cifra que podemos comparar con los 60.280 euros del Audi Q4 con tracción total más económico, Advanced 50 e-tron quattro, que cuenta con un sistema de propulsión menos potente, 220 kW (299 CV), una batería de 76.6 kWh útiles, y una autonomía también por debajo del Genesis, con 412 km WLTP. Un Audi capaz de cargar a 125 kW como máximo, pero que cuenta con un maletero más grande, 520 litros, pero sin espacio en el frontal.
Algo que nos indica que los alemanes tendrán en este GV60 un duro rival que llegará en breve al mercado.
