Aunque era un secreto a voces, el presidente del grupo Renault-Nissan ha confirmado sus planes para dar un paso atrás en la fabricación de baterías, y encargar esta labor a una empresa externa.
Según Ghosn, desde la alianza se quiere enfrentar la tecnología propia con la de otros suministradores, para lograr crear una competencia, y conseguir el mejor producto posible. Por primera vez el presidente del grupo nombra directamente a una de estas compañías, la coreana LG. Un fabricante que según Ghosn, cuenta con un producto tecnológicamente más avanzado, y que ya se encarga de las baterías de modelos como el Renault ZOE o el Twizy.
Preguntado sobre el futuro de las fábricas de baterías de Nissan, Ghosn ha asegurado que de momento los planes son mantener su actividad de forma normal, mientras siguen explorando las posibilidades de trabajar con más suministradores.
Un «de momento» que puede significar que estas instalaciones tienen los días contados, al menos en el formato de producción actual. Es muy probable que a corto plazo, Nissan de un cambio de 180 grados en su relación con NEC, con la que comparte la joint venture AESC, que firma las actuales baterías del LEAF.
Esto no tendría que suponer una rotura del acuerdo, si no un cambio en su forma. NEC dejaría de suministrar las baterías, y pasaría sólo a ensamblar las que lleguen desde LG en las fábricas de Nissan. Una posibilidad que no ha sido confirmada por Carlos Ghosn, que suponemos todavía está negociando a dos bandas, con LG, y la propia NEC.
Vía | Autonews
