A finales del pasado año el grupo alemán Daimler anunciaba el cierre de su aventura conjunta con Evonik dedicada a la fabricación de baterías para coches eléctricos. Un anuncio sorprendente para muchos en plena expansión de la gama de eléctricos e híbridos enchufables del fabricante alemán.
Ahora apenas tres meses después Daimler anuncia que invertirá 100 millones de euros en su planta de Kamenz, que se convertirá en una instalación dedicada a la fabricación de baterías, y donde operará bajo el nombre de su filial, AC CUmotive.
Daimler espera que la demanda de baterías en el sector de la automoción crezca de forma importante en los próximos años. Para ello preparará los 20.000 metros cuadrados de su fábrica de Kamenz, de donde saldrán las celdas que lleven los modelos enchufables del grupo germano.
Una reapertura que además servirá para acoger a la mayor parte de los 280 empleados que habían perdido su trabajo por el anterior cierre. Sin duda una gran noticia para los que habían perdido su puesto de trabajo.
Pero sin duda lo mejor es que un gigante como Daimler no se da por vencido en la búsqueda de conseguir hacerse un hueco en el competitivo negocio de las baterías para coches eléctricos. Un nicho de mercado que todos los estudios auguran un futuro brillante, pero que corre el riesgo de acabar en casi su totalidad en manos de los grandes fabricantes coreanos.
Fuente | Daimler
