En plena expansión y aburguesamiento de la gama Mini, BMW parece que ha decidido dar un golpe sobre la mesa y lanzar al mercado un prototipo que ha llamado la atención de forma importante, pero al que pocos daban posibilidades de llegar al mercado.
Hablamos del Mini Superleggera. Un espectacular concepto presentado durante el pasado Concours d’elegance de Villa d’Este, donde ha cautivado a los asistentes con su diseño y su planteamiento deportivo, pero al mismo tiempo respetuoso gracias a un sistema de propulsión eléctrico.
Según la revista británica CAR, el consejo de BMW ha aprobado la producción del Mini Superleggera. Un modelo que llegará en 2018 y que formará parte de una gama más pequeña, y cada vez más eficiente.
Se espera que el modelo final tenga algunas modificaciones respecto al prototipo, pero los rumores indican que no serán demasiadas. El trabajo del carrocero italiano Touring Superleggera ha sido excelente, y BMW mantendrá buena parte de la línea actual.
A nivel mecánico, todavía quedan tres años, por lo que puede pasar cualquier cosa. Lo normal es que los alemanes trasplantasen el sistema híbrido enchufable del Mini Countryman, en plena fase de pruebas, y que sería la opción más fácil. Esto permitirían lanzar un Superleggera con tracción total, con un motor eléctrico en la parte delantera, y un gasolina en la trasera.
Pero tampoco se descarta la llegada de una versión 100% eléctrica como el prototipo. Un modelo que lleva el motor de BMW i3, que con sus 125 kW (170 CV) y el bajo peso de este, le permiten convertirse en un pequeño GTI que sobre el papel debería ser de lo más divertido y adictivo.
Vía | CAR
