La empresa de servicios públicos de Nueva York considera que la adopción del coche eléctrico es una gran alternativa para consolidar la relación con los clientes y, claro, representa otra línea de negocio que no quiere dejar de aprovechar. Por eso, han lanzado una plataforma comparadora de precios que ayudará a potenciales clientes a elegir su próximo coche eléctrico.
En concreto, la empresa encargada del desarrollo ha sido Consolidated Edison Company of New York, Inc., conocida como Con Edison por los locales, y consiste en un Marketplace online para “hacer más fácil a los clientes la adquisición de un coche eléctrico”. Esto representa un paso más que se suma a la decisión de National Grid de añadir vehículos eléctricos a su comparador/buscador.
Y es que el futuro de los servicios públicos pasa por un un consumo decreciente, o al menos plano, y los vehículos eléctricos ofrecen un ‘rayo de esperanza’. Esto es muy sencillo, si sus clientes actuales tienen la necesidad de comprar un coche eléctrico (o se la generan), necesitarán más potencia, consumirán más, requerirán de infraestructura, en resumen, gastarán más.
Pero un matiz importante en esta ecuación, la empresa de Servicios Públicos de Nueva York no gana dinero por el volumen de energía generado, lo hace a través de las inversiones realizadas en los ‘partners’ encargados de entregarla, es decir, las comercializadoras, y serán estos terceros los encargados de ‘explotar’ las líneas de negocio mencionadas más arriba.
El primer paso es la herramienta Cars conEdison que, con la reciente actualización, compara los vehículos eléctricos disponibles con el modelo de gasolina más barato y más similar en espacio/prestaciones, incluye la información detallada de los costes a lo largo de un ciclo de vida promedio. También incluye el índice Enervee Score, un sistema que puntúa los vehículos en términos de eficiencia.
Por ejemplo, el nuevo Nissan Leaf cuesta, a priori, 6.000 dólares más que un VW Jetta 1.8, pero si se incluyen los costes de electricidad vs. gasolina, se descuentan las ayudas locales y federales, tenemos como resultado que, al cabo de 5 años, el Leaf costaría 7.000 dólares menos que la berlina alemana. El detalle lo tenéis en la imagen que está más arriba.
Está claro que esta herramienta tiene un objetivo de negocio para NY Utilities, pero es una manera objetiva de mostrar uno de los tantos beneficios del coche eléctrico, en este caso, el factor económico al compararlo con modelos similares, pero con motor de combustión interna. Es un ‘gancho’ comercial, pero también una herramienta que ayudará a ‘educar’ a los potenciales clientes.
