"Podemos lanzar coches al mercado como si fueran pretzels". BMW afirma haber superado la velocidad de los fabricantes chinos

El ritmo innovativo de los fabricantes de coches eléctricos chinos ha pillado con el pie cambiado a los grupos occidentales. Actualizaciones constantes, lanzamiento de nuevos modelos cuando sus predecesores apenas llevan unos pocos años a la venta, rápida adopción de las últimas tecnologías del sector... Podemos afirmar sin ningún tipo de duda que el país asiático está marcando el ritmo al resto de la industria.

Marcas como Audi o Renault se han puesto como objetivo igualar la velocidad de sus rivales chinos. Sin ir más lejos, se espera que los del rombo presenten el próximo mes de noviembre el Twingo de cuarta generación, el cual verá la luz tras un desarrollo relámpago de apenas dos años. En el caso de la firma de los cuatro aros, la versión de producción del prototipo Concept C debería ponerse a la venta en 2027.

Sin embargo, hay un actor que afirma haber superado a los chinos en este aspecto: BMW. La compañía acaba de presentar el nuevo iX3, que ha sido el encargado de estrenar la nueva plataforma Neue Klasse. Gracias a esta arquitectura, la firma bávara podrá agilizar el lanzamiento de sus futuros modelos eléctricos, los cuales se sucederán a un ritmo vertiginoso.

Joachim Post, director de desarrollo de BMW, señala que la marca lanzará un total de 40 nuevos modelos y actualizaciones en los próximos dos años. "¿Quién puede hacer eso? Nuestros colegas en China tampoco pueden. Un solo coche siempre se puede desarrollar con bastante rapidez. Pero ese no fue el enfoque con el iX3 y la Neue Klasse. Hemos invertido mucho tiempo y energía para impulsar la tecnología en toda la gama de modelos. Porque solo tendremos éxito si integramos las tecnologías que ya hemos desarrollado en toda la gama".

BMW utilizará menos personal para desarrollar sus futuros modelos

"Ahora podemos lanzar coches al mercado como si fueran pretzels, como dicen en Baviera. Nadie nos seguirá tan rápido como planeamos hacer en los próximos dos años. Y por eso digo que lo que estamos haciendo ahora es más que 'China Speed'". El directivo señala que esto es posible en gran medida gracias a la IA, una tecnología que permite acortar tareas que normalmente llevarían días a apenas unos minutos.

Esto también supondrá utilizar menos personal en el desarrollo de sus futuros vehículos. "Solo 1.000 personas trabajarán en un coche nuevo. Antes necesitábamos mucha más mano de obra. La IA nos está ayudando enormemente en este sentido, por ejemplo, con la programación. Estamos ganando una velocidad increíble en el desarrollo de software y, con ello, estamos ganando velocidad adicional en todo el proceso de desarrollo".

Fuente | Carscoops