Después de cinco años en el mercado, el Chevrolet Volt nos dice adiós, tal como lo hemos conocido, para dejar paso a la nueva generación.
Una primera generación que este mismo mes de mayo cesará definitivamente su producción en una línea que inmediatamente comenzará su adaptación para acoger a la nueva versión.
Durante estos cinco años el Volt ha tenido momento buenos, como el eléctrico más vendido durante muchos meses en Estados Unidos, como momentos malos con una fuerte decadencia que comenzó a finales del 2013. Finalmente General Motors habrá entregado unas 70.000 unidades, muy lejos de las expectativas creadas antes de su lanzamiento.
Y eso a pesar de que según las estadísticas, los niveles de satisfacción de los propietarios del Volt han estado en las cotas más elevadas de toda la industria, muy por encima de otros modelos eléctricos. Algo que no ha evitado que con el paso de los meses, las ventas se han ido desinflando al mismo ritmo que han crecido las de la competencia.
Puede que el precio tenga mucho que ver. El Volt siempre ha estado un peldaño por encima del LEAF, no nos olvidamos de los 43.000 euros que pedían en Europa, e incluso con la rebaja a mitad de su ciclo lograba igualar la propuesta de competidores como BMW. Algo que parece que no ha podido resistir, y que ha animado a GM a lanzar una nueva versión que llega sin mediar una renovación o restyling.
Ahora se abre un periodo donde el fabricante norteamericano tendrá que preparar el lanzamiento de la nueva versión del Volt, al que nos falta poner un precio que de nuevo marcará el futuro de sus ventas y que esperamos conocer antes del verano.
