El coche eléctrico en China. La clave es la recarga


Mientras que en Europa y Estados Unidos el gran impedimento para que el coche eléctrico logre mejores cifras de ventas es el precio, justo antes de la autonomía, en China el problema es otro.
Ciudades como Pekín están sirviendo de laboratorio para ver que no sólo con incentivos económicos se puede expandir de forma correcta la movilidad eléctrica. Se trata de un entorno altamente poblado, con una densidad de coches elevada, y con unos problemas de contaminación tan graves, que han obligado a las autoridades a poner una serie de limitaciones, que van desde la prohibición de circulación por días alternos según matrícula, hasta limitar directamente la compra de coches y condicionarla a una lotería.