BYD K9, el autobús eléctrico a la conquista de Israel

Una de las empresas dedicadas al transporte de pasajeros por carretera de Israel ha comenzado un plan para cambiar sus modelos díesel por autobuses totalmente eléctricos. La idea de la empresa Dan Bus es sustituir progresivamente los 1.300 autobuses que forman su flota por modelos totalmente eléctricos, en un movimiento destinado tanto a recortar las emisiones como para acceder a unos menores costes operativos.

Se trata de una inversión millonaria donde los primeros modelos llegarán de la mano del fabricante chino BYD, que serán los primeros de su clase en circular por las calles del Tel Aviv, y los encargados de abrir un potencial mercado en un estado especialmente concienciado con la reducción de la dependencia energética y donde los vehículos eléctricos crecen a un ritmo más que acelerado.

El BYD K9 es un autobús de 12 metros de largo y un interior configurable según las necesidades de cada cliente, que dispone de dos motores eléctricos con una potencia conjunta de 180 kW ( 245 CV)  que le impulsan hasta una velocidad máxima de 96 km/h. Está alimentado por un pack de baterías de litio (LiFePO4) de 324 kWh que le proporcionan una autonomía de entre 250 y 300 kilómetros.

Adicionalmente dispone de un sistema de placas solares en su techo, que le permite recargar las baterías mientras circula, o durante sus paradas. Por su parte los tiempos de recarga dependerán del tipo de salida utilizado, pero en este caso BYD solamente nos indica una medida, 3,5 horas cada 100 kWh con una instalación especialmente pensada para este modelo.

Con estas armas el fabricante chino quiere hacerse un hueco en el sector del transporte público donde hasta el momento lo mas lejos que se ha llegado en occidente son a los modelos híbridos y algunos experimentos con modelos enchufables, un desarrollo lento donde BYD quiere aprovechar para introducir sus productos que cuentan con una enorme difusión en el mercado chino donde se han convertido en modelos muy apreciados capaces de proporcionar una alternativa de movilidad real para las ciudades del gigante asiático, y que ahora también quieren hacerlo fuera de sus fronteras.

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Fuente | Chinacartimes