Carga eléctrica en el mismo tiempo que con combustible

Los investigadores están desarrollando una batería que puede ser recargada en 10 minutos, pudiendo así hacer miles de kilómetros con un mismo vehículo eléctrico. Si repostar gasolina nos tomara cinco o seis horas ¿no sería para pensárselo? ¿y si este tiempo fuese de una hora?. En los vehículos eléctricos el «repostaje» a veces necesita un largo tiempo para ser recargado, siendo esto una de las principales barreras de estos vehículos. Por eso no es de extrañar que estén habiendo fuertes desarrollos e investigaciones en lo que se refiere a evolucionar la infraestructura de carga de las baterías.

Pero poner una gran cantidad de energía en una batería en un corto periodo de tiempo provoca nuevos desafíos en lo que rodea a esta tecnología ya que las baterías de litio estándar simplemente no están optimizadas para recibir cargas demasiado rápidas, al igual que la propia red de puntos de carga y la conexión entre cable y coche. Luego hay serias cuestiones en lo que rodea a dicha red, la cual ha de ser lo suficientemente robusta como para soportar la gran cantidad de energía necesaria para recargar un buen número de vehículos eléctricos.

Las grandes compañías de coches están claramente convencidas de traernos vehículos eléctricos con un coste reducido y una buena autonomía. De hecho la próxima generación del Nissan Leaf nos promete una autonomía mayor que debería rondar más de 200 KM en conducción real, y que llegaría con una versión menos equipada y costosa, ideal para los nuevos compradores. General Motors por su parte también ha invertido más de 7 millones en una compañía llamada Envia Systems dedicada al desarrollo de nuevas baterías con mayor densidad energética.

En cuanto a las universidades, Paul Braun ( Universidad de Illinois ) trabaja en nuevos materiales para el desarrollo de nuevas baterías. Según Braun, un coche a velocidad de crucero por ciudad gasta la misma energía que una bombilla de unos 100 vatios aproximadamente, y que la carga rápida ha de aumentar unas 20 veces la velocidad a actual, un desarrollo que ya está en camino, y que tardará entre 5 y 10 años.

Todos los adelantos para acortar los tiempos de recarga en los coches eléctricos no harán otra cosa más que incrementar el deseo de los potenciales nuevos clientes a adquirir uno de estos vehículos. La gente no se queja de que sólo se tardan unos minutos en repostar gasolina, lo que nos quiere decir que si queremos que los eléctricos tengan la misma aceptación, las nuevas tecnologías han de ir por el camino adecuado y recortar los tiempos de recarga.