A partir del 1 de marzo el ayuntamiento de Madrid limitará el acceso al centro urbano a los coches según el nivel de contaminación. La administración local aplicará un sistema usado por ejemplo por París hace unos meses durante una de sus peores crisis de emisiones.
Esto significará que cuando al menos dos estaciones de control de una zona superen los 250 microgramos de NO2 por metro cúbico de aire durante dos horas consecutivas, se tomarán medidas para reducir las emisiones. Cuando el nivel de alerta supere los 400 microgramos en tres estaciones, entonces pasaremos a un nivel de alerta superior con consecuencias más importantes.
Entre estas se encuentran la limitación de velocidad en la M-30 y en las carreteras de acceso a Madrid a partir de la M-40 a un máximo de 70 km/h. También la prohibición de estacionamiento de no residentes en la zona SER salvo excepciones, y la restricción de la circulación en el interior de la M-30 del 50% de los coches cuya matrícula sea par o impar como la fecha.
Esta situación nos hace pensar que el problema de las emisiones en Madrid están relacionadas principalmente con el transporte público y privado. Esto quiere decir que la solución será mejorar las cifras de emisiones de estos. Para ello nada menos que electrificar el transporte, ya sea con autobuses o coches eléctricos.
Madrid tendría que poner en marcha un plan de incentivos, con medidas por ejemplo como la exención del cumplimiento de la limitación de entrada en la ciudad en los días de mayor concentración de partículas a los modelos eléctricos. También sería necesario la puesta en marcha de un plan de ayudas regionales siguiendo el ejemplo de Andalucía y País Vasco, que priman con 5.000 euros adicionales la compra de un coche eléctrico.
No es fácil la solución. Se trata de un problema que necesita una actuación integral donde se potencien los servicios de transporte público, se limite el acceso y aparcamiento de los coches con motor de combustión, se promocionen los sistema de compartir coches, y se facilite el movimiento de los ciclistas.
Vía | Vozpopuli
