La Alianza formada por los fabricantes Renault, Nissan y Mitsubishi, se han marcado como objetivo el sumar fuerzas para lograr desarrollar una oferta de coches eléctricos que además logren reducir sus precios. Lo harán compartiendo inversiones en una nueva plataforma con la que esperan vender 2 millones de modelos impulsados por electricidad entre 2020 y 2025.
Esta plataforma servirá como base para una serie de modelos medianos, una categoría que incluye a propuestas de volumen como los más de moda que nunca todocaminos, y que gracias a las sinergias entre las marcas, y la fuerte economía de escala, podrán llegar al mercado con precios muy similares a los modelos con motor de combustión.
Sin duda hablamos de una nueva dimensión en cuanto a ventas. Podemos comparar estas expectativas con las cifras logradas hasta ahora por el grupo, el tercer mayor grupo de fabricantes de automóviles del mundo, que en pasado año entregó entre sus marcas un total de 91.000 coches eléctricos, un 11% más que en 2016.
Para lograr alcanzar esos objetivos de ventas, la Alianza pondrá a la venta hasta 12 nuevos coches eléctricos entre 2020 y 2022. Una nueva oferta que basará su propuesta en esta nueva y flamante plataforma que ofrecerá múltiples beneficios a las marcas. Se estima que el ahorro de desarrollo se situará entre el 20 y el 30% respecto a realizar el desarrollo de forma individual. Algo que acelerará la amortización de la misma, y que permitirá antes lograr precios más competitivos.
Desde el grupo se desarrollarán plataformas compartidas para otros tamaños de eléctricos. Nissan y Renault han considerado este movimiento para los modelos compactos, como el futuro ZOE o el nuevo LEAF, pero decidieron optar por empezar con un todocamino compacto al estilo Qashqai, cuya demanda no para de crecer en todos los mercados.
Además de buscar ahorrar en aspectos como la propia plataforma, desde la Alianza también tienen sobre la mesa la posibilidad de aplicar esta estrategia en otros apartados, como el desarrollo y fabricación de baterías, motores, y otros componentes que dan forma a los sistemas eléctricos. Algo que sin duda resultaría cuando menos curioso si recordamos que hace pocos meses que Nissan ha vendido su división de baterías.
El objetivo no es otro que tratar de mantener en la medida de la posible su posicionamiento gracias a las tempranas inversiones en un sector que los informes indica crecerá de forma muy importante en los próximos 5 años. Se estima que el mercado mundial de coches eléctricos crecerá hasta lograr unas ventas de 5.57 millones de unidades en 2025, un aumento de siete veces respecto a 2017. Un ritmo que seguirá aumentando hasta llegar a los 8.43 millones de unidades al año para 2030.
Opinión
El resumen es que el grupo Renault, Nissan y Mitsubishi quieren hacer crecer sus ventas, y que estas les ayuden a colocarse en lo más alto en cuanto a los principales fabricantes a nivel mundial. Pero para lograrlo deben no sólo ampliar oferta, o reducir precios. Deben también adaptarse a un mercado que está cambiando no sólo en aspectos como el tipo de motorizaciones.
Cada vez tienen más importancia aspectos como las ayudas a la conducción, y llegado el momento la conducción autónoma. Pero eso será sólo la punta de un iceberg donde los clientes pedirán también conectividad, o cambios en la relación con los concesionarios, con servicios como la recogida y devolución del coche en la vivienda después de pasar la revisión, o el poder realizar las comunicaciones mediante una aplicación online.
Vía | Nikkei
