La planta piloto de la empresa sueco-finlandesa Stora Enso que producirá materiales de carbono bio a partir de lignina, un polímero orgánico con mucho potencial, ha comenzado sus trabajos. Tras una inversión de 10 millones de euros se ha puesto en marcha una nueva línea de producción de un sistema de carbono a base de madera. Unas celdas que se destinarán a coches eléctricos, la electrónica de consumo, así como sistemas de almacenamiento de energía a gran escala, todo con un sistema formado por materiales orgánicos y fácilmente reciclables.
Bajo las previsiones que auguran un crecimiento del mercado mundial de baterías de hasta diez veces la cifra actual, en la próxima década se producirá una búsqueda de materiales más sostenibles para la electrificación de toda la movilidad por parte de los grandes productores.
Dado que la sostenibilidad se está convirtiendo en una prioridad máxima para la industria automotriz, los fabricantes y aquellos productores de baterías han de centrarse, en gran medida, en la reducción de las emisiones de carbono asociados a la producción del coche eléctrico.
Hoy en día, el carbono a base de fósiles se utiliza en los ánodos de las baterías recargables. Al convertir la lignina separada de la madera en materiales de ánodo a base de carbono, el material no renovable de grafito sintético puede ser finalmente reemplazado.
«Con nuestra planta piloto ahora intensificando sus operaciones, Stora Enso está entrando en una nueva cadena de valor en el suministro de materiales de ánodo más sostenibles para baterías. Con Lignode, podemos proporcionar un material un material con base biológica, competitivo en costes y de alto rendimiento para reemplazar el grafito utilizado convencionalmente. Para servir al mercado de materiales de ánodo de rápido crecimiento, ahora estamos explorando asociaciones estratégicas para acelerar la ampliación y comercialización en Europa«, ha declarado Markus Mannström, vicepresidente ejecutivo de la división de biomateriales de Stora Enso.
La planta piloto de materiales de carbono de base biológica se encuentra en las instalaciones de producción de Sunila de Stora Enso en Finlandia, donde se produce lignina industrialmente desde 2015.
La capacidad de producción anual de lignina de la bio-refinería es de 50.000 toneladas, lo que convierte a Stora Enso en el mayor productor de lignina kraft del mundo.
Fuente | Store Enso