A lo largo del año pasado la marca de la joint-venture de SAIC, Wuling y General Motors vendió en China 452.238 coches eléctricos, incluyendo híbridos enchufables, un 160% de incremento interanual. Fue una parte significativa de los 1.760.176 coches vendidos de marca Wuling, un 13,5% por encima del resultado de 2020 -casi un trimestre China estuvo parada por el COVID-.
El siguiente objetivo es llegar al millón de NEV, como dicen los chinos refiriéndose a «vehículos de nuevas energías» (FCEV, BEV y PHEV), principalmente coches eléctricos, y especialmente los más pequeños. El HongGuang Mini EV -en portada- ha sido un sonoro éxito comercial del que ya se han fabricado más de medio millón de unidades, por encima de los 550.000. Prácticamente no ganan dinero con ese cochecillo para las masas y le ha salido competencia normal y descarada.
Wuling seguirá creciendo concentrándose en las tecnologías de su núcleo de negocio: baterías, motores eléctricos y sistemas de control. Añadirá una capacidad de producción de 20 GWh de baterías en Guangxi, así como transmisiones y motorizaciones para híbridos enchufables. Otro aspecto de mejora será el del software, para tener un mayor control sobre sus productos.
Wuling ya mira allende las fronteras chinas, pero sin irse demasiado lejos. El sudeste asiático y Oriente Medio son terrenos fértiles donde irse expandiendo sin grandes riesgos, especialmente Indonesia. En una segunda fase, mercados emergentes como la India o Egipto estarán en su punto de mira para motorizar a las clases populares con coches eléctricos asequibles.
Ya en tercer lugar se piensa en Europa, Japón y Corea del Sur, que son huesos más duros de roer, pero Estados Unidos y Canadá no están en sus planes. Para Norteamérica los productos de Wuling son «de juguete», y General Motors ya está trabajando en productos adecuados para ellos y mucho más grandes.
Los más listos de la clase sabrán que mediante importadores pequeños esos productos van a llegar antes, véase el mismo HongGuang Mini EV, que se venderá por estos lares con otro nombre: Dartz Freze, a un precio de 15.995 euros. El importador, Invicta Motors, todavía no lo ha traído. Aunque lo hagan, veremos muy pocos circular por España.
