¿Están los híbridos enchufables iniciando su caída en ventas?

En los últimos años estamos viendo como los fabricantes están apostando por los híbridos enchufables como una solución intermedia para los que no estén preparados para el coche eléctrico, y también una forma de reducir emisiones contaminantes sin renunciar a los motores de combustión. Pero la dinámica de las ventas está cambiando en Europa donde cada vez se venden menos enchufables en favor de los eléctricos puros. Incluso en los segmentos profesionales.

Y es que las flotas de las empresas han sido un termómetro muy importante para los híbridos enchufables. Unos clientes fieles que han acudido en masa gracias a las ayudas públicas que en muchos mercados permitían hacerse con una unidad con un precio muy competitivo. Pero ahora las empresas también están empezando a bajar sus compras, lo que anticipa un futuro complicado para esta tecnología.

Según un informe del proveedor de servicios de flotas alemán Dataforce, las matriculaciones de híbridos enchufables volvieron a caer en mayo. Algo que supone una caída por octavo mes consecutivo.

En Alemania, las nuevas matriculaciones de híbridos enchufables en el mercado de flotas fueron un 18% inferiores al mismo mes del año pasado con casi 9.550 unidades. Desde enero, las nuevas matriculaciones han caído un 23,8% hasta las 45.100 unidades.

Malas señales de un mercado el profesional que ha tenido un rendimiento mejor que la media del mercado general, y teniendo en cuenta todas las tecnologías, diésel, gasolina, eléctricos e híbridos, ha visto como sus ventas entre enero y mayo han caído un 6,8% hasta las 321.000 unidades. Una diferencia importante respecto a las matriculaciones de híbridos enchufables.

Por supuesto la situación es complicada y el descenso puede ser puntual provocado por dificultades inesperadas como la guerra de Ucrania, que ha paralizado la producción de componentes como los arneses. Un aspecto que la industria ha logrado solucionar rápidamente y que debería darnos un dibujo de la situación con más fiabilidad en los próximos meses.

Pero el futuro no es muy brillante ya que por un lado la tecnología se enfrenta a un final asegurado en 2035, cuando no se puedan seguir fabricando este tipo de vehículos. Algo que frenará las inversiones en nuevas propuestas ya a corto plazo.

Hay que añadir que muchos mercados, como Alemania, han decidido poner fin a las ayudas públicas a los híbridos enchufables. Algo que supondrá que a partir del 1 de enero de 2023 no podrán acceder a los 4.500 euros de incentivo. Un aspecto que podría provocar un pico de ventas este año, pero que seguramente tenga como consecuencia un hundimiento de las ventas en la primera parte del próximo.

Según Thomas Peckruhn, vicepresidente de la Asociación Central del Comercio Alemán de Motores. «Las señales de los minoristas indican que los clientes ya se han alejado de la tecnología. Los híbridos enchufables están cada vez más cerca del cementerio«

Fuente | Automobilwoche