
Volvo supera los 5.000 camiones eléctricos vendidos y muestra que hay alternativas al diésel
Volvo alcanza las 5.000 unidades de camiones eléctricos entregadas en todo el mundo. Su gama cubre distribución, construcción y recogida de residuos, con menores costes operativos que los modelos diésel. La marca acelera así su estrategia hacia emisiones cero para 2040.

Volvo Trucks acaba de alcanzar un nuevo hito al lograr alcanzar los 5.000 camiones eléctricos entregados a clientes en 50 países de todo el mundo. Desde el inicio de su apuesta eléctrica en 2019, estos vehículos han recorrido cerca de 170 millones de kilómetros en operaciones comerciales, reduciendo significativamente tanto las emisiones de CO₂ como la contaminación acústica.
Entre los más representativos de esta gama se encuentran los Volvo FM Electric y Volvo FH Electric, este último galardonado como Camión Internacional del Año 2024. También están disponibles el Volvo FL Electric, FE Electric, FM Low Entry, FMX Electric, FH Aero Electric y el VNR Electric, cubriendo así un amplio abanico de aplicaciones que incluye desde la distribución urbana y regional hasta la construcción y la recogida de residuos.
Los camiones eléctricos de Volvo varían en capacidad de batería según el modelo. El Volvo FL Electric, diseñado para distribución urbana, ofrece baterías de 94 a 395 kWh con una autonomía de hasta 300 km. El Volvo FE Electric, usado en recogida de residuos, tiene baterías de 265 a 395 kWh y alcanza unos 220 km en condiciones de uso intensivo.

Para transporte regional, el Volvo FM Electric cuenta con baterías de 315 a 540 kWh y una autonomía de hasta 380 km. En larga distancia, el Volvo FH Electric destaca con 540 kWh (ampliable a dos baterías) y unos 500 km de autonomía real.
En carga rápida, estos camiones admiten hasta 250 kW en corriente continua, permitiendo una recarga del 20% al 80% en aproximadamente una hora y media o dos horas en el caso de los modelos de mayor capacidad de batería.
Uno de sus principales atractivos para las empresas de transporte de los camiones eléctrica es el menor coste operativo frente a los modelos diésel tradicionales. Al prescindir del motor térmico, se eliminan muchos componentes mecánicos sujetos a desgaste, pastillas y discos de freno…etc, lo que se traduce en menores necesidades de mantenimiento.
Además, la eficiencia energética de los motores eléctricos permite un ahorro significativo en consumo, especialmente en trayectos urbanos con paradas frecuentes, donde los camiones eléctricos pueden recuperar energía mediante frenada regenerativa.

Roger Alm, presidente de Volvo Trucks, destaca que cada vez más empresas repiten con la marca al ampliar sus flotas eléctricas, atraídas no solo por los beneficios ambientales, sino también por el confort para los conductores. Menor nivel de vibraciones, reducción del ruido y aceleración suave hacen del entorno de conducción algo más agradable y seguro, un factor cada vez más valorado por los profesionales del sector.
A largo plazo, Volvo apuesta por una estrategia tecnológica en tres frentes para lograr la neutralidad de emisiones en 2040. Esta incluye camiones eléctricos a batería, vehículos impulsados por pila de combustible de hidrógeno y motores de combustión compatibles con biocombustibles sostenibles como HVO, biogás o hidrógeno verde.
Fuente | Volvo