Sekisui Chemical ha desarrollado un nuevo material que puede triplicar la capacidad de las baterías de ion litio. A efectos prácticos esto supone poder equipar a los coches eléctricos con acumuladores que les permitan recorrer distancias de hasta 600 km en una sola carga, casi tanto como los coches de gasolina con un solo deposito.
El nuevo material almacena la electricidad usando silicio en vez de los materiales convencionales basados en carbono. La gran novedad de la aleación de silicio desarrollada por la compañía japonesa es que ha conseguido superar los problemas de durabilidad asociados al uso del silicio en baterías, lo que permitirá su comercialización en un futuro muy próximo.
Se trata de una batería de ion litio de capa fina, flexible y muy versátil, que puede adaptarse para su uso en diferentes ámbitos como electrónica, almacenamiento en red o vehículos eléctricos, para los que la compañía estima una mejora que puede poner su rango de acción a la par de muchos modelos de gasolina. Todo ello gracias a una fórmula que protege el ánodo de silicio frente a la degradación asociada a los procesos de carga y recarga.
Sekisui Chemical completa su descubrimiento con un nuevo electrolito, el encargado de transportar la electricidad en la batería, que se puede aplicar por deposición. Esto eliminará la necesidad de inyectar un liquido durante el proceso de fabricación de las pilas, un paso menos que supone un gran incremento de la velocidad de fabricación, hasta 10 veces más rápido que los procesos actuales. Para ello Sekisui Chemical apuesta por un electrolito de gel, que bien puede ser un nuevo polímero orgánico de gran conductividad.
Baterías con el triple de capacidad y a la mitad de precio. La compañía confía en que la simplificación del proceso de fabricación y el aumento en la capacidad reduzcan el precio del kWh en más del 70%, pudiendo bajar de los actuales 976$/kWh a tan solo 290 $/kWh.
Además de la capacidad y el precio, la seguridad también se verá beneficiada con el uso del nuevo electrolito. La sustitución de líquidos volátiles en las baterías por un material más estable disminuirá el riesgo de explosión o combustión de los acumuladores.
En conjunto se trata de una batería con ánodo de silicio y electrolito polimérico con una densidad volumétrica de 900 Wh/L. Los planes de Sekisui Chemical pasan por una primera fase de prueba en la que se probaran los acumuladores por diferentes fabricantes, programada para el próximo verano, y un comienzo de producción industrial que comenzará en 2015.
Fuente | Sekisui
