¿Y si quiero un coche eléctrico ahora?

Hace unos días hemos visto el artículo de Michael Glaviano (link) donde nos detallaba que pasos debemos tener en cuenta la hora de adquirir un vehículo eléctrico, pero desde un punto de vista de un consumidor de los Estados Unidos.

Santiago R. Meier nos envía un interesante artículo donde nos explica cuales son las opciones reales si nos queremos hacer con un coche eléctrico en estos momentos en nuestro país.

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Opción A:
Comprar uno nuevo es una inversión importante, no debemos hacerlo por impulso sino tras haber reflexionado sobre cuál es el modelo más adecuado a nuestras necesidades. Es fundamental haber probado a fondo el vehículo antes de adquirirlo, ya que es frecuente que datos importantes como las prestaciones o la autonomía estén exagerados, nada mejor que comprobarlo.

Fiat Panda nuevo por 38,500€

Deberíamos conducir el vehículo por diferentes tipos de vía (ciudad/carretera) haciendo una conducción tranquila (para tener una idea de autonomía) pero también es importante hacer una prueba de aceleración, velocidad punta, capacidad para subir pendientes pronunciadas, etc. Deberíamos también poder probarlo hasta estar convencidos, nunca comprar un vehículo del que tengamos dudas sobre su comportamiento. Por supuesto es importante hacerse mil preguntas sobre mantenimiento, recambios, garantía, consumo energético, etc…(como viene detallado en el informe de Michael Glaviano)

Peugeot 106 segunda mano, 14,500€

Si nos decidimos a comprar uno de segunda mano porque tienen un coste más atractivo, debemos tener en cuenta que probablemente tengan las baterías flojas. No hay ningún otro elemento que sufra un desgaste importante, luego ¿cuál sería el motivo para venderlo sino es por el estado de las baterías? Debemos tener en cuenta que las baterías de litio son muy costosas, por supuesto es posible sustituir las baterías que tenga de serie (plomo-ácido, NiMh…) por unas de litio, pero ésto puede costar entre 3.000 y 20.000 € en función de las prestaciones y/o la autonomía que estemos buscando, en el caso de un coche.

Citroen Saxo eléctrico en Alemania por 4,500€

Hay que tener en cuenta que éstas pueden durar alrededor de 5 años haciendo un uso diario del vehículo, al mismo tiempo que tendremos fácilmente el doble o incluso el triple de autonomía que con unas baterías de plomo. Si calculamos el kilometraje que podemos hacer con las de litio, puede ser rentable frente a otros tipos de batería a priori mas económicas. Son por tanto, una inversión a medio plazo. Además de las baterías, no hay mucho más que podamos hacer para aumentar la autonomía, sobretodo sino queremos modificar el sistema de tracción (motor/regulador/transmisión..) se me ocurre reemplazar los neumáticos por unos más estrechos y/o con menor resistencia a la rodadura.

Opción B:
Para los que tengan conocimientos básicos de mecánica/electricidad y que tengan los medios necesarios y las habilidades, convertir un coche no plantearía grandes dificultades.

Porsche 912 convertido

Existen opciones en el mercado de componentes para todos los bolsillos. El gran inconveniente es la homologación, que es un proceso muy complejo y costoso. En España para homologar la reforma hay que conseguir los certificados de compatibilidad electromagnética de la UE (CEE aprooved) de cada uno de los componentes de tracción (baterías, motor, regulador, cargador…), luego un ingeniero colegiado tiene que autorizar y firmar el proyecto y con éste informe favorable deberíamos poder solicitar una nueva ficha técnica en la ITV con la que poder asegurar el vehículo y circular legalmente.

Think City, a la venta en Noruega

En otros países de la UE, como Inglaterra o Suecia, el proceso se reduce a una mañana de papeleo, una revisión técnica «rápida» en la propia estación de ITV y el pago de unas tasas simbólicas. Aquí, según el caso, puede ser necesario incluso llevar el vehículo a la INTA para que un equipo de ingenieros haga una serie de pruebas. Ésto puede costar varios miles de euros y nadie nos garantiza que el proyecto supere las exhaustivas pruebas…

Cabe la posibilidad de remolcar el vehículo a otro país comunitario donde no sea tan complicado homologar y volver con una placa de matrícula extranjera, que nos permita circular en España sin problemas, es cuestión de evaluar los gastos y las ventajas/inconvenientes de ésta opción.

En cuanto a los componentes, hay variedad de opciones según el presupuesto y las necesidades. Si tenemos un coche eficiente (ligero, aerodinámico…) podemos invertir unos 50.000€ y equiparlo con un kit AC propulsión (motor/regulador similar al de un Tesla Roadster) y baterías de litio, consiguiendo unas prestaciones de infarto (más de 200cv) y una autonomía muy respetable.

Sigma GTE, 200 cv eléctricos

Si lo que buscamos es un utilitario con las prestaciones justas para movernos por la ciudad al ritmo del tráfico, podemos electrificar un Smart (por ejemplo) por unos 10.000 € si ya tenemos el coche, con baterías de litio que nos den una autonomía aceptable.

Un saludo, y buena compra.

Santiago R. Meier
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