Los vendedores de Toyota no están interesados en el coche eléctrico

Hace pocos días que Toyota presentaba en París la última generación del iQ eléctrico, el que debería estar llamado a ser el primer Toyota totalmente eléctrico fabricado en cadena y con una distribución global, algo que de momento no sucederá al volver a dilatar su llegada de forma indefinida.

Una de las razones por la que Toyota no lanzará el iQ eléctrico es por las elevadas cifras de ventas y la rentabilidad que está logrando con su familia de híbridos, que en plena contracción del mercado están logrando cifras récord ;y escalando posiciones en las listas de ventas de casi todos los mercados. Pero otra de las razones es que según una encuesta, los concesionarios norteamericanos se han posicionado en contra del lanzamiento de un modelo eléctrico, prefiriendo que Toyota centre todos sus esfuerzos en los híbridos.

Esto quiere decir que para Toyota, si los vendedores no quieren un producto, este no se venderá, por lo que a corto plazo no veremos un eléctrico en los concesionarios del fabricante japonés, aunque los propios vendedores reconocen que será inevitable que antes o después un eléctrico haga acto de presencia en su oferta.

Según esta encuesta realizada por el portal de los vendedores norteamericanos, el 85% de los propietarios de puntos de venta se alegran de la decisión de Toyota de posponer las ventas de un modelo puramente eléctrico, mientras que el 61% creen firmemente que este llegará a medio plazo, y sólo el 5% piensa que los eléctricos serán un foco de ventas en los próximos cinco años.

Entonces la pregunta es saber cuales serán los modelos más exitosos para los vendedores, y a esta pregunta el 70% ha respondido que los híbridos, el 10% los híbridos enchufables, mientras que de forma sorpresiva los modelos impulsados por una pila de combustible de hidrógeno ocupan el 15% de las preferencias de los vendedores.

Por lo tanto, no sólo es que Toyota no crea a corto plazo en el coche eléctrico como si hacen fabricantes como Nissan o Renault, la cuestión es que ha visto necesario esperar a que la tecnología alcance un nivel de desarrollo más elevado, y al mismo tiempo se ha tomado un tiempo para que los vendedores se convenzan de que se trata de un producto competitivo, algo que sobre el papel nunca sucederá ya que para los concesionarios, el coche eléctrico no es interesante por su incomparable sencillez mecánica que reducirá la actividad de sus talleres a la mínima expresión.

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Fuente | Plugincars