Tesla investiga la conducción autónoma

Tesla, quien ya se había propuesto poder sacar al mercado un modelo con conducción autónoma, está buscando ingenieros expertos para dar forma al futuro programa informático capaz de manejar por su cuenta el coche, un sistema que debe ser capaz de administrar la información en una conducción real y conocer de antemano como debe comportarse el vehículo.

Tesla se ha asociado con Google con el fin de poner en marcha esta innovación en sus futuros modelos, un programa informático que gracias a sensores como cámaras integradas en el vehículo, radares y ultrasonidos, obtendrá la información necesaria para poder circular de forma autónoma siendo vital que el sistema interprete correctamente los datos sin ningún fallo, razón por la cual la seguridad informática será su punto fuerte al aliarse con el gigante de internet.

Para dar el gran salto Tesla requiere a sus ingenieros que aporten su experiencia en sistemas de seguridad a la conducción, como son asistentes de estacionamiento o mantenimiento de carril, y por si fuera poco, también que posean bastantes conocimientos sobre ingeniería informática. Estos deberán ser capaces de crear el programa de inteligencia artificial que contemple todas las situaciones reales de conducción, y un sistema que seleccione la solución correcta a cada caso proporcionando la máxima seguridad vial.

El gran abanico de situaciones y comportamiento a seguir por un vehículo sólo son posibles de idear por los mejores expertos en automoción, un capital humano de calidad que las grandes empresas fabricantes del automóvil poseen y retienen, lo que obliga a Tesla a asociarse con el gigante Google que ya cuenta con experiencia en este segmento.

Tesla pondrá todo su empeño en conseguir esta notable innovación en sus codiciados modelos eléctricos, ellos saben que para crear inteligencia artificial necesitan los mejores expertos y que esta es una tecnología de futuro donde como con su actual gama quieren situarse a la cabeza. Ahora la gran pregunta es si la gente está preparada para que un programa informático se haga cargo de la conducción de su coche, tal vez una barrera que necesitará más tiempo para superarse que la tecnológica que según Elon Musk, en tres años podría estar disponible para su aplicación comercial.

Vía | Torque News