Durante la presentación de las nuevas versiones del Tesla Model S dotadas de tracción a las cuatro ruedas, los responsables del fabricante norteamericano aseguraban que esta configuración no sólo no aumentaría el consumo, sino que lo reduciría.
Faltaban por conocer unos datos de la agencia de protección medioambiental (EPA) que ya disponemos, a los que podemos añadir los propios datos de Tesla a velocidad constante en autovía. Al mismo tiempo Tesla ha anunciado que a finales del próximo mes de enero actualizará el sistema de los Model S, permitiendo mejorar de forma significativa las cifras de autonomía.
La versión P85D, la variante más potente, verá como con la actualización su autonomía oficial pasará de los 389 kilómetros anunciados en un primer momento a los 407 kilómetros que disfrutará bajo el ciclo EPA. También podemos tener en cuenta las mediciones de la propia Tesla, que otorga una autonomía de 458 kilómetros a una velocidad constante de 105 km/h, mientras que si subimos a 120 km/h la autonomía baja hasta los 386 kilómetros.
Por su parte la 85D, la versión intermedia, ve como su cifra de autonomía pasará de los 426 kilómetros originales, a los 434 kilómetros bajo ciclo EPA. En cuanto a la autonomía por autovía, a una velocidad de 105 km/h logra hacer 474 kilómetros con cada carga, mientras que a 120 km/h consigue alcanzar los 401 kilómetros.
Por supuesto estas cifras tienen sus condicionantes. Uno de ellos es que las mediciones han sido realizadas con las llantas de 19 pulgadas y los neumáticos de bajo consumo, las más discretas a nivel de imagen, pero las más eficientes. Si optamos por unas llantas más espectaculares, podremos ganar algo en aceleración y paso por curva, pero perderemos en autonomía.
Este incremento de la autonomía es gracias al uso más eficiente de los motores. Según explica el co-fundador de Tesla, JB Straubel, con la nueva configuración el Model S contará con un motor trasero encargado principalmente de la aceleración, y uno más pequeño situado en la parte delantera.
Cuando circulamos por autovía y no necesitamos la potencia del trasero, este entra en un modo de descanso, y se desconecta hasta que el conductor requiera de nuevo su apoyo. Mientras tanto la propulsión corre a cargo del motor delantero que con sus 221 caballos logra mantener sin problemas una velocidad de crucero.
Pero no sólo se increentará la autonomía. En la versión más potente la velocidad máxima dará un salto adelante pasando de los 210 kilómetros a los que está limitado en la actualidad, hasta los 250 km/h. Un guiño al mercado alemán, donde este pasecto es muy valorado por los usuarios de las autobahn.
Vía | Insideevs
