Acaba de arrancar una de las aventuras más importantes de las últimas décadas. Hablamos de la vuelta al mundo en un avión impulsado exclusivamente por motores eléctricos, alimentados por energía solar.
El Solar Impulse 2 como recordamos es una aeronave con capacidad para dos personas pero dotado de una envergadura mayor que la de un Boeing 747, nada menos que 72 metros, un peso de cerca de 2.500 kg, apenas 400 kilos más que un Tesla Model S, y capaz de moverse gracias a las 17.248 células solares que recubren su estructura.
No hay mucho espacio para las comodidades en la cabina. El espacio para el piloto es justo el necesario para acomodar a este. Algo importante en las etapas más largas, como los cinco días sin aterrizar que tendrán que afrontar en su periplo por el océano pacífico. Cinco días en los que el piloto tendrá que permanecer en su asiento sin apenas posibilidad de moverse.
Solar Impulse es mucho más que una aventura de unos suizos con ganas de conocer mundo. Detrás de este proyecto hay todo un ejército de investigadores, con ABB a la cabeza, probando nuevas soluciones tanto a nivel de las celdas solares, los motores, inversores, pero también las baterías, fundamentales en este trayecto y de que sólo sabemos que disfrutan de una densidad energética de 260Wh/kg.
El reto es cubrir las 21 etapas que separan al Solar Impulse de dar una vuelta completa al mundo, regresando de nuevo al punto de salida que ha tenido como escenario la capital de los Emiratos Árabes, Abu Dabi.
Podéis seguir la aventura del Solar Impulse 2:
Web oficial: Solarimpulse
