Un estudio indica que Alemania se está quedando atrás en el desarrollo del coche eléctrico

Cada año la consultora Roland Berger realiza un estudio sobre el estado de la movilidad eléctrica, analizando la situación de los 7 grandes países, para saber cual es su situación en la carrera por colocarse en cabeza de esta pujante industria.

El informe analiza tres áreas principales: Industria, tecnología y mercado.

El pasado año el informe colocaba a los alemanes como líderes en el global de las tres categorías, a pesar de unas ventas débiles, pero con una fuerte inversión pública que en lugar de ayudas a la compra de coches, se destinaban a financiar los centros de investigación y desarrollo de las marcas alemanas. Pero este año las cosas han cambiado y los germanos han dado un importante salto atrás para colocarse en la cola del pelotón y colocándose en el quinto puesto.

El otro factor que ha provocado el bajón alemán ha sido que estos se han centrado principalmente en el desarrollo de modelos de gama alta, mientras que japoneses y norteamericanos han invertido más en modelos accesibles.

Por sectores, en el industrial China y Estados Unidos han reducido de forma importante la brecha tecnológica que le separaban de Japón. No sólo viven un fuerte crecimiento en la demanda interna de vehículos eléctricos, sino que también cuentan con una industria de fabricación de baterías propia que crece cada ejercicio.

En el desarrollo de la tecnología Japón sigue siendo el líder gracias a la inversión que gobierno y empresas está realizando en esta industria. Le sigue de cerca China, que gracias a las medidas para reducir las enormes cifras de emisiones contaminantes ha puesto importantes sumas de dinero sobre la mesa para el desarrollo tecnológico del sector del automóvil.

En cuanto al mercado, de momento Estados Unidos es el líder destacado. El pasado año se han matriculado en este mercado 110.000 unidades. A nivel porcentual países como China o Alemania han vivido crecimientos por encima del 20%. Francia por su parte acaba de poner un importante plan de ayudas que otorga hasta 10.000 euros a los que cambien su coche diésel por uno eléctrico, lo que se espera sirva para disparar las ventas.

Fuente | Roland Berger